Reducir las emisiones de CO2 se ha convertido en una obesión para la industria de la automoción. Para contribuir a ello, Mann-Filter ha desarrollado una nueva generación de filtros cuyos medios filtrantes utilizan la nueva impregnación basada en la lignina. No se trata de nuevos filtros, sino que, dentro de una selección de los filtros más vendidos, se aplica la lignina como un sustituto ecológico a las resinas de origen fósil.
La lignina, uno de los biopolímeros más abundantes, es un subproducto de la industria papelera y proviene de la madera. Su función en las plantas es aportarles rigidez y resistencia, permitiéndoles crecer y mantenerse erguidas. Durante la producción de papel, la lignina, puede aislarse como subproducto y utilizarse como un recurso renovable en diversas aplicaciones.
La función de las impregnaciones en los medios filtrantes, casi igual que en las plantas, es aportarles rigidez, resistencia a los agentes químicos contenidos en los aceites sintéticos de última generación, impermeabilización, e incluso protección anti-llama en el caso de los filtros de aire de camión.
Un 5% menos de huella de CO2 y un 27% menos de petróleo crudo
La sustitución de resinas fenólicas por ligninas, además de aportar las mismas características técnicas, permite reducir la huella de CO2 durante la producción hasta en un 5% y la cantidad de petróleo crudo en aproximadamente un 27%.
“Como ejemplo, una sola referencia, el filtro de aire Mann-Filter C 17 237, ahorra 3,93 toneladas de CO2 y más de 4.500 litros de petróleo crudo al año, según las cifras de ventas de 2024, además, la celulosa utilizada para la fabricación del medio filtrante proviene de fuentes certificadas“, explican desde la propia compañía.
De este modo, cada vez más productos de este fabricante se están convirtiendo gradualmente a lignina, en sustitución de las resinas fenólicas, reduciendo las emisiones de CO2.
Y es que, aunque a partir de 2035 solo se matricularán en la UE coches nuevos sin emisiones de CO2, millones de turismos y vehículos comerciales con motores de gasolina o diésel seguirán en circulación, no sólo en la UE, sino en todo el mundo. Por lo tanto, las soluciones de filtración como la basada en la lignina desempeñan un papel crucial en la mejora de la sostenibilidad de los vehículos nuevos y existentes, especialmente los de combustión.