La UE ha dado luz verde a la nueva normativa que establece una reducción del 30% a partir de 2030 en las emisiones contaminantes de los nuevos camiones, con una meta intermedia del 15% en 2025, en comparación con los niveles registrados en 2019.

De esta forma, los fabricantes que incumplan esta directriz tendrán que hacer frente a una sanción financiera, según publica Europa Press.

Asimismo, esta nueva legislación, la primera en la que la UE se marca un objetivo de recorte de emisiones de dióxido de carbono (CO2) para este tipo de vehículos, obliga a que las ventas de vehículos pesados con cero emisiones contaminantes o con emisiones bajas en 2025 sea, al menos, del 2% de su cuota de mercado.

Por su lado, la Comisión Europea en 2022 deberá proponer nuevos objetivos para la siguiente década, en línea con los compromisos adquiridos en el Acuerdo de París.

Actualmente, las emisiones de camiones, autobuses y autocares representan el 6% de las totales de CO2 en el bloque comunitario y el 27% de las del sector del transporte.