La crisis del coronavirus ha trastocado los hábitos de vida de la sociedad, que sentirá mayor recelo por garantizar su seguridad. Los conductores optarán por desplazarse en el día a día en el vehículo particular, evitando utilizar el transporte público. En este sentido, Jesús Monclús, director de Prevención y Seguridad Vial de Fundación Maprfre, ha señalado la necesidad de avanzar hacia una movilidad más segura y sostenible, reconociendo "el papel de todos los modos de transporte, incluido del vehículo particular, una de las alternativas con menor riesgo de contagio del virus".

Fundación Mapfre ha analizado las mejores opciones de movilidad de cara a las fases de desescalada y recomienda los desplazamientos en vehículo privado con mascarilla, preferentemente si es eléctrico. La bicicleta, la moto, el patinete o caminar si las distancias no son muy largas, también se sitúan como alternativas para garantizar una movilidad segura.

El reinicio de la movilidad en algunas provincias españolas vendrá ligado a un incremento de la siniestralidad, que ha visto reducidas sus cifras, "pero menos de lo que hubiera sido deseable”, en parte debido a la “falta de cumplimiento de las normas de tráfico, sobre todo relacionadas con la velocidad, y como resultado de un mayor estrés laboral y anímico y peor calidad de sueño entre algunos conductores".

Como medidas para salvaguardar la seguridad de la población, Fundación Mapfre propone flexibilizar el horario de entrada y salida al trabajo para evitar coincidir a la misma hora en el transporte; promover el teletrabajo; optar por medios de transporte que, además de seguros, permitan mantener las distancias de seguridad; compartir el vehículo particular, que hasta ahora suponía entre el 30% y el 50% de la movilidad laboral total y en la mayoría de los casos solo con un ocupante; así como el uso de la mascarilla.