La Guardia Civil ha anunciado la inspección de dos talleres ilegales de reparación de vehículos en Ciutadella (Menorca). Los locales desmantelados estaban ubicados en las inmediaciones del polígono del municipio balear, donde se han denunciado a dos varones, ambos de 34 años y nacionalidad española.
Las sospechas y primeras investigaciones comenzaron durante una patrulla rutinaria por parte de los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil por las inmediaciones del polígono, cuando los agentes detectaron que la primera de las dos instalaciones sospechosas albergaba actividad comercial.
Ya dentro de la instalación, se localizaron doce vehículos en proceso de reparación, así como tres elevadores de columna en pleno funcionamiento, máquina montadora-desmontadora de neumáticos, máquina cargadora de aires acondicionados para vehículos, compresor de aire, máquina para regular las luces de los vehículos, un toro mecánico y una gran cantidad de herramientas.
Tras cotejar los datos del responsable de estas instalaciones, se comprobó que ya había sido denunciado con anterioridad, en 2017, por agentes del Seprona de la Guardia Civil, en otro taller ilegal en el casco urbano de Ciutadella.
La operación fue más allá, puesto que en una parcela de suelo rústico se desmanteló otro taller ilegal dedicado a la reparación mecánica, chapa y pintura de vehículos, donde el responsable se dedicaba en su tiempo libre a la reparación de vehículos a particulares.
La Benemérita comprobó que ambos talleres clandestinos carecían de placa identificativa, no disponían de licencia municipal de actividades, ni documentación relacionada con la gestión de los residuos de la correspondiente actividad.
Actuaciones remitidas por el Seprona
Las actuaciones realizadas por el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil han sido remitidas al Ayuntamiento de Ciutadella, a la dirección general de Industria y a la conselleria de Medio Ambiente del Govern balear para que se abran los expedientes administrativos correspondientes.
Asimismo, la Guardia Civil ha aprovechado el anuncio de estos dos talleres clandestinos para recordar que este tipo de instalaciones "suponen una grave amenaza para el medio ambiente en cuanto a la gestión de residuos, y un peligro para los usuarios que deciden reparar su vehículo en este tipo de talleres, que no se encargan de presentar presupuestos o facturas ni garantías sobre los trabajos realizados, ni piezas utilizadas en la reparación de los vehículos", toda vez que suelen "utilizar recambios sin trazabilidad ni garantías".
En la nota, la Benemérita afirma que estos talleres ilegales suponen "un perjuicio al sector profesional, puesto que incurren en competencia desleal frente a los talleres que si cumplen con todos los requisitos legales y medioambientales".