Reparación | GLP o GNC: diferencias, ventajas e inconvenientes de estos sistemas de propulsión

En un nuevo vídeo publicado en el canal de SPG de YouTube, Juan Francisco Calero analiza las ventajas e inconvenientes de utilizar coches propulsados a gas, diferenciando los dos tipos de gas que existen.

Una de las ventajas de llevar un vehículo con autogas GLP es que su precio es mucho más bajo. Por el contrario, su consumo es superior, al tener menos capacidad calórica que el gasoil o la gasolina. Según Juan Francisco Calero, para un automóvil con un consumo de gasolina de 6,5-7 litros, en un vehículo GLP serán 9 litros. Así lo ha indicado este reconocido especialista en comunicación del mundo de la automoción en un nuevo vídeo publicado en el canal de SPG en YouTube.

En el audiovisual, dedicado a los coches propulsados a gas, explica los diferentes tipos de gas y sus usos, centrándose sobre todo en el GLP y GNC. También analiza como funcionan, los precios y las ventajas y desventajas a la hora de hacer conversión a uno de estos dos sistemas (si se pudiese) y así recibir la etiqueta ECO.

Calero señala que, no obstante, la electrónica ha hecho que “se reduzca bastante la diferencia de consumo y también que la potencia sea inalterada”. Otra ventaja del GLP es que su red de recarga está muy extendida. Son más de 800 puntos donde se puede poner gas en España y además es un combustible que está subvencionado, por lo que el repostaje sale entre 0,65 y 0,80 céntimos. Esto puede ser ventajoso para los conductores que hacen muchos kilómetros a lo largo del mes.

CONVERSIÓN DE UN VEHÍCULO DE GASOLINA A GLP

Aparte, en un taller especializado siempre existe la opción de hacer una conversión a GLP. “Aunque no es barata”, apunta Calero. “Esta operación puede salir en torno a 2.500 o 3.000 euros, en función de la complejidad del coche y de la calidad del dispositivo que utilices”, añade. A continuación explica que normalmente esta adaptación se puede hacer perfectamente en vehículos de gasolina de entre 2004 y 2006 si cumplen con la normativa. Tras la conversión, se obtiene una pegatina ECO con la que se pagan menos impuestos y se permite la circulación en zonas de tráfico restringido, salvo las de cero emisiones.

Respecto a los mitos que tiene este combustible, Calero dice que no es cierto que sea más peligroso que la gasolina, pero sí que exige una revisión del depósito específica en la ITV. También desmiente que esté prohibido el circular con un vehículo GLP en garajes subterráneos o sitios cerrados. Los vehículos nuevos ya tienen una homologación que lo permite sin ningún riesgo.

GNC, CON MENOS EMISIONES

El GNC (gas natural comprimido) es un sistema de propulsión alternativo, más limpio en cuanto a emisiones de CO2 que el GLP y con la ventaja de ofrecer un consumo más bajo. Asimismo, tiene la etiqueta ECO.

Sin embargo, para el experto hay dos dificultades principales en relación a este gas, por un lado, el menor número de lugares de repostaje, y por otro, la mayor presión de los depósitos hace que se encarezca la compra del vehículo. Otra más sería que no es tan fácil ni resulta económica la adaptación a este gas en vehículos usados.

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