Los 221 concesionarios que componen la red oficial de concesionarios de Toyota España han superado la certificación de la empresa SGS, empresa especialista en inspección, verificación, análisis y certificación en distintos ámbitos de la industria, de que cumplen estrictamente con los protocolos de prevención y control de infecciones antiCovid-19.
Tanto las exposiciones de vehículos nuevos y vehículos de ocasión como los talleres y las instalaciones de posventa se han sometido a un proceso de auditoría externo que avala sus protocolos, motivo por el que han recibido un certificado de cumplimiento además de un sello, un distintivo adhesivo, que figurará en un lugar visible en cada una de ellas. De esta forma, Toyota explica en un comunicado que "reafirma su política de poner siempre al cliente en el centro de todas sus actividades" y que "los clientes y potenciales clientes pueden confiar en que su visita se desarrollará siempre en un entorno seguro y con las máximas garantías sanitarias y de prevención".
Protocolo de seguridad
Para que todas las operaciones se desarrollen con la máxima seguridad, el protocolo detalla que todo el personal de las exposiciones y los talleres estará equipado con mascarillas FFP-2, poniendo también a disposición de los clientes mascarillas quirúrgicas y gel hidroalcohólico.
Además, se ha señalizado la distancia de seguridad de 2 metros en las zonas de espera —caja, ventanillas de recambios, recepción…— y se ha identificado claramente las zonas por las que podrán transitar los clientes, reorganizando las salas de espera para que siempre haya distancia de seguridad entre un asiento y otro, cerrando las zonas infantiles o dejando inoperativas las máquinas de autoservicio de café.
También se limpian y desinfectan regularmente todas las instalaciones, haciendo especial foco en todos los vehículos expuestos y las zonas de contacto más frecuentes. Los accesos y zonas de paso cuentan con cartelería específica con información sobre las normas de seguridad sanitarias, estableciéndose, siempre que la instalación así lo permita, una puerta de entrada y otra de salida diferenciada. Además, se han instalado mamparas protectoras en los puestos de atención directa con los clientes o, como alternativa, los asesores comerciales y otros empleados llevan pantalla facial y mascarilla FFP-2.
Flexibilidad
El protocolo incluye otras medidas que se han ido implementando, flexibilizando la comunicación directa con el cliente y priorizando la comunicación telemática, de forma que se entrega todo el material que sea posible por esta vía —fotografías, presupuestos, documentación asociada a la compra o reparación…— y reduciendo el número de visitas al concesionario. Se está fomentando el uso de la firma digital y el pago con tarjeta, idóneamente sin contacto, y se han reorganizado los puestos de trabajo, al tiempo que se hace siempre especial hincapié en el control del aforo dentro de las instalaciones con el objetivo de garantizar la distancia de seguridad entre personas.
Por último, dentro del protocolo se incluyen algunas medidas específicas para las operaciones de postventa, como la posible redistribución del número de citas diarias para evitar aglomeraciones o alteración de los tiempos de servicio debido a las medidas implementadas para garantizar la seguridad de clientes y empleados. Además, se ofrece la higienización con ozono del vehículo tras la operación en taller y se desinfectan las zonas de contacto en presencia del cliente.
