Las proximidades del parque natural de las Lagunas de la Mata y Torrevieja (Alicante) se podrían estar viendo afectadas por el impacto ambiental generado por un taller clandestino de reparación de vehículos, que presuntamente operaba sin autorización administrativa, recién desmantelado por la Guardia Civil. 

La intervención, según informa Europa Press, se llevó a cabo tras detectar una actividad irregular mediante la vigilancia con dron. El dispositivo se inició el pasado octubre en una parcela situada en una urbanización de Torrevieja. Tras diversas observaciones realizadas por la unidad de drones de la Unidad de Seguridad Ciudadana (Usecic) de la ciudad alicantina, la Patrulla de Fiscal y Fronteras (Pafite) trasladó la información a los agentes del Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) de Guardamar, quienes asumieron la investigación, tal y como ha explicado el instituto armado en un comunicado.

En el primer tramo del operativo, los agentes inspeccionaron las instalaciones donde presuntamente se ejercía la actividad irregular e identificaron a su responsable, quien tenía la parcela en régimen de alquiler. En el interior, localizaron doce turismos y dos furgonetas de distintos propietarios, en su mayoría de titularidad extranjera, así como mesas de trabajo con piezas desmontadas, herramientas de mecánica y envases con aceites usados. Además, en una de las furgonetas se hallaron repuestos nuevos listos para su montaje, como filtros, un alternador y otros componentes.

Más tarde, los agentes constataron múltiples infracciones administrativas, como falta de autorización y licencias para ejercer la actividad de taller mecánico, deficiencias en materia de seguridad industrial y ausencia de medidas de prevención y protección, incumplimientos en la gestión de residuos tóxicos y peligrosos como aceites usados, filtros y otros componentes contaminantes e irregularidades en el tratamiento, almacenamiento y entrega de residuos a gestores autorizados.

En este sentido, al tratarse de residuos catalogados como tóxicos y peligrosos, entre ellos aceites usados con metales pesados como plomo, cadmio, zinc o cromo, no se descarta que pueda derivar en una posible responsabilidad penal, dado el riesgo que podría suponer su abandono o vertido en zonas próximas a entornos naturales protegidos, según la Guardia Civil.

Una parcela reincidente

Por si fuera poco, los agentes comprobaron al cotejar la documentación que la misma parcela ya había sido objeto de denuncia el 5 de marzo de 2024 por hechos similares, lo que podría agravar la situación del responsable por posible reincidencia. Ahora, el varón, un vecino del municipio de 47 años, ha sido propuesto para sanción administrativa por todas las infracciones detectadas. De hecho, las actuaciones han sido remitidas a los organismos municipales y autonómicos competentes para la tramitación de los expedientes correspondientes.

Igualmente, ante la gravedad de los hechos y la reincidencia, los agentes han solicitado ante la autoridad competente el cierre y precinto de las instalaciones.