Los vehículos modernos incorporan cada vez más componentes electrónicos y, como consecuencia, ha crecido el número de sensores instalados en los mismos. Estos sensores registran un amplio espectro de señales esenciales para el funcionamiento del motor y de su sistema de inyección y emiten señales necesarias para garantizar numerosas funciones de control y regulación del motor, así como para el confort y la seguridad.

Ante el aumento de la variedad de tipos de sensores y del mayor control e inspección de los componentes electrónicos en las ITV, durante este mes Bosch Automovil anima a sus distribuidores y talleres a ofrecer la inspección de sensores de forma proactiva a sus clientes.  

Bosch ofrece una gama muy amplia de todos los tipos de sensores importantes del vehículo, tanto turismos como comerciales, y prácticamente para todas las marcas y modelos. Esta gama abarca desde los sensores que participan directamente en la gestión del motor, a los que intervienen en la seguridad de la conduccióm.

Los sensores Bosch responden a casi cualquier requisito del automóvil. Entre ellos, se encuentran sondas lambda, medidores de masa de aire, sensores de presión, de temperatura, de detonación o de revoluciones.

Todos ellos se caracterizan por su calidad de primer equipo, su alta precisión y su larga vida útil, además de ser fáciles de sustituir.