Anfac acaba de presentar su plan de movilidad, que contempla 50 medidas entre las que destacan la creación de una ley específica con ayudas a la renovación del parque automovilístico, así como eliminar el impuesto de matriculación y actualizar el de circulación, el cual se vincularía al uso y no a la compra.

Otras propuestas fiscales son la creación de un IVA reducido al 10% para los vehículos alternativos, la modulación del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales para los turismos en función de su antigüedad o introducir deducciones en el Impuesto de Sociedades en la compra de coches eficientes, según informa Europa Press.

Los empresarios también defienden introducir deducciones en el IRPF, en su tramo nacional o autonómico, por la compra de un vehículo alternativo, la bonificación del IAE sobre la actividad industrial derivada de la fabricación de vehículos alternativos y la posibilidad de eximir o introducir un tipo reducido a la electricidad suministrada a vehículos eléctricos en puntos de recarga rápida.

Todas estas ayudas están orientadas a crear una Ley de Movilidad que contemple un marco de ayudas para favorecer la transición hacia una movilidad de bajas y cero emisiones, así como una fiscalidad renovada para el automóvil.

A esto se suma la implementación de un plan estructural de renovación del parque automovilístico que contemple todas las tecnologías alternativas disponibles. La organización subraya que lo adecuado sería un programa de tres años con una dotación de 200 millones de euros en cada ejercicio.

Este monto se dividirá en 150 millones de euros para impulsar la movilidad de vehículos de cero y de bajas emisiones, y 50 millones de euros para otro programa anual que incentivará la adquisición de vehículos con sistemas de propulsión de combustión.

A este respecto, el vicepresidente ejecutivo de la organización, Mario Armero, apunta que los planes de incentivo a la adquisición de vehículos en España "son autosuficientes", ya que generan mayor recaudación de lo que cuestan, tal y como se ha demostrado con iniciativas anteriores como los planes Pive o 2000E.

Otro de los puntos destacados es una dotación presupuestaria para fomentar la implantación de puntos de recarga de vehículos eléctricos, la eliminación de la figura del gestor de carga y la creación de un marco que permita la interoperabilidad de los postes.

También destaca en este plan las líneas de ayuda para el suministro de gas natural, incluyendo la recarga doméstica, además del impulso del gas renovable, el gas licuado de petróleo, y el fomento de líneas de financiación específicas para el despliegue de una red de puntos de repostaje de hidrógeno.

Por otro lado, Anfac defiende crear un marco de actuación homogéneo en relación con los episodios de alta contaminación en las ciudades, además del uso del etiquetado de la DGT en función de su potencial contaminador, así como elaborar índices de calidad del aire homogéneos en toda España.

En el área del transporte, también propone la introducción de nuevas tecnologías en taxi y VTC para optimizar los recorridos, aumentar las paradas exclusivas para taxis con el fin de evitar trayectos en vacío o la renovación de las flotas de autobuses por modelos cero y bajas emisiones y de todos los servicios municipales por este tipo de vehículos.