La Jefatura Superior de Policía de Aragón está divulgando una campaña en la que alerta a la ciudadanía sobre una nueva estafa detectada en Zaragoza, donde al menos cinco personas han sido engañadas mediante un método basado en la simulación de averías en vehículos estacionados para cobrar grandes cantidades de dinero por una falsa reparación. La estafa está coordinada por un grupo de tres personas.
Según informa la agencia Efe, el engaño empieza cuando la víctima se encuentra junto a su coche, siempre estacionado en vía pública, y se le acerca un primer individuo que le advierte de que el vehículo hace un ruido extraño o que, supuestamente, se le ha caído una pieza. En ese momento, "por casualidad", aparece un segundo individuo que,dice ser mecánico y se ofrece a revisar el vehículo y que, tras una breve inspección, asegura que falta una pieza importante, pero que puede solucionarlo de inmediato.
Entonces, la Policía Nacional explica que el primer individuo abandona el lugar y el falso mecánico convence al conductor para desplazar el vehículo a una calle más amplia y, durante el trayecto, llama por teléfono a un tercer miembro del grupo, al que presenta como proveedor de la pieza. Ya en el nuevo lugar, levantan el coche con un gato hidráulico y piden a la víctima que permanezca en el interior del vehículo mientras simulan una reparación. Al terminar, le exigen entre 600 y 800 euros en efectivo, alegando que esa supuesta pieza costaría en realidad más del triple.
En algunos casos, las autoridades afirman que si la víctima no dispone de esa cantidad en ese momento, los estafadores la acompañan hasta un cajero automático o incluso hasta su propio domicilio para que les entregue el dinero.
Ante estos hechos, la Policía Nacional recomienda no permitir que personas desconocidas manipulen el vehículo en la vía pública, contactar siempre con el seguro o un taller profesional ante cualquier sospecha de avería, desconfiar de quienes ofrecen ayuda mecánica de forma insistente y sin identificación y denunciar inmediatamente en el 091 o en la comisaría más cercana, en caso de ser víctima de este engaño.
Desde la Jefatura de Policía se insiste, además, en que este tipo de delitos se basan en el engaño, la presión psicológica y la apariencia de profesionalidad y en que la colaboración ciudadana y la denuncia son fundamentales para evitar que más personas resulten perjudicadas.