El empleado de un taller de carrocería era el cabecilla de una trama de estafa a aseguradoras, descubierta por la Guardia Civil en la Comunidad Valenciana. Este hombre ha sido detenido junto a otras 11 personas por estafa y falsedad documental.

Los estafadores trasladaban los vehículos hasta un lugar deshabitado, donde los colocaban en posición final tras un supuesto accidente, además de derramar fluidos de automoción en los alrededores. Posteriormente llamaban a los servicios de emergencias para dar parte de las supuestas lesiones sufridas.

Para no levantar sospechas, el cabecilla modificaba la titularidad del vehículo, con el fin de entorpecer las investigaciones sobre el historial de siniestros del automóvil.

De este modo logró ocultar temporalmente que el mismo turismo se habría visto involucrado en tres accidentes de similares daños, pero diferentes en tiempo, lugar, vehículos contrarios y compañías aseguradoras.

Los integrantes del grupo acordaban previamente cuál sería la posición de cada uno de ellos en el vehículo cuando éstos supuestamente chocaran entre sí, así como sus declaraciones a los diferentes servicios de emergencia.

Sin embargo, durante las investigaciones se comprobó la similitud de los daños sufridos por el mismo vehículo en distintos siniestros, lo que condujo a la detención de los implicados.