La limpieza y desinfección del vehículo se ha convertido a partir de la crisis del coronavirus en un protocolo esencial en el sector. Pero, desde Certified First recuerdan en un post que limpiar y eliminar las superficies no es suficiente para conseguir la desinfección deseada y matar los gérmenes.

Esto se consigue con biocidas (bactericidas, virucidas), aunque la esterilización es la que destruye absolutamente microorganismos. Pero precisa temperatura, tiempo, equipo y otros controles, por lo que se reserva a centros donde la importancia de higiene es crítica, como los hospitales.

En el caso de la automoción, desde la firma señalan que se deben usar productos específicos para coche. Así, para la carrocería, una vez que el profesional se ha protegido con guantes y mascarilla, se debe utilizar agua caliente (a 60ºC) y jabón, productos específicos para el cuidado del coche (bayetas de microfibra) y, en menor medida, soluciones hidroalcohólicas al 70%. Además, recuerda que se emplean productos virucidas, se debe leer con atención las instrucciones para comprobar que no dañarán la pintura.

Por lo que respecta al interior del coche, primero se deben lavar las superficies; utilizar desinfectante y secarlas para evitar la humedad. También debe aspirarse la suciedad de la tapicería, sobre todo las alfombrillas (si son de goma, usar agua y jabón; si son de tela utilizar un cepillo de cerdas y después aspirar la suciedad).

Asimismo, es muy importante la desinfección de volante, palanca de cambios y de la columna de la dirección (indicadores, limpiaparabrisas, control de crucero, entre otros), freno de mano, salpicadero, apoyabrazos, asientos, cinturones, tiradores y zonas susceptibles de contacto Para esto, es mejor usar una bayeta desechable.

Hay que tener especial cuidado con las rejillas de ventilación, explican en el artículo, ya que los espacios pequeños entre las rendijas son difíciles de limpiar. Pero se puede recurrir a pinceles de espuma. Conviene limpiar estas rejillas una vez al mes y si se nota olor a moho al encender el aire acondicionado, se debe usar un limpiador desinfectante en spray.

Para la tapicería, es aconsejable usar productos específicos, pero evitar sustancias agresivas como lejía, agua oxigenada, amoniaco, por ejemplo. Tampoco hay que abusar de los productos con alcohol, ya que algunos materiales se pueden decolorar.

De acuerdo con un estudio publicado en The New England Journal of Medicine, el coronavirus puede subsistir en los plásticos del salpicadero y algunos controles hasta 72 horas; en el acero y otros metales de componentes, como tiradores de las puertas y algunas piezas del exterior, hasta dos o tres días; en aerosoles y en el aire del habitáculo, hasta tres horas. En los asientos de tela o cuero, sólo se ha determinado que el período es inferior al de otros elementos rígidos.