Diciembre es el mes del año en el que más vehículos se desguazan y se dan de baja definitiva en la Dirección General de Tráfico. Según los datos analizados por la Red Operativa de Desguaces Españoles (RO-DES), el duodécimo mes, teniendo en cuenta la tendencia de la última década, presenta un aumento de la actividad del 50%.

RO-DES explica que esta situación se produce por el pago del impuesto de vehículos de tracción mecánica que especifica que "el período impositivo coincide con el año natural, salvo en el caso de primera adquisición de los vehículos", por ello, los conductores esperan hasta el último trimestre para presentar las solicitudes de retirada y baja definitiva que se reciben en los Centros de Tratamiento Autorizados de Vehículos.

Analizando las estadísticas del año pasado publicadas por la DGT, se observa que las bajas se dispararon en diciembre respecto a meses anteriores, especialmente en los territorios donde se concentra mayor población y, por tanto, mayor movilidad.

En esta decisión influyen principalmente factores económicos, como los incentivos para la compra de un vehículo nuevo, como el Plan Renove o Moves II, tras solicitar la baja definitiva de un coche de cierta antigüedad o categoría energética. Este año, además, tras finalizar el estado de alarma se detectó un atípico aumento de la demanda durante los meses de mayo y junio, consecuencias de averías en los coches tras el período de inactividad provocado por el confinamiento y las restricciones de movilidad.

Asimismo, la Asociación Española para el Tratamiento Medioambiental de los Vehículos Fuera de Uso (Sigrauto) ha informado que, en 2019, 813.768 vehículos fueron debidamente descontaminados y retirados de circulación, presentando el mes de diciembre una cifra de 110.858 unidades, dato muy superior a las 70.277 vehículos que se desguazaron en octubre, el siguiente mes mayor cantidad; confirmando que la tendencia se repite año a año si repasamos la evolución histórica de esta demanda de servicios.