Reparación | Asetrama concluye un proyecto de restauración de una antigua apisonadora iniciado en 2018

Con más de un año de retraso debido a la pandemia, la máquina, restaurada en colaboración con el I.E.S. María Ibars de Denia, se ha trasladado ahora a su lugar definitivo, el Bosc de Diana de Denia, para su exhibición.

La Asociación de Talleres de Reparación de Automóviles y afines de la Marina Alta de Alicante (Asetrama), perteneciente a la Federación Española de Empresarios Profesionales de Automoción (Conepa), ha trasladado a su lugar definitivo y para su exposición permanente en el Bosc de Diana de Denia una antigua apisonadora restaurada en colaboración con los alumnos de FP básica del departamento de Transporte y Mantenimiento de Vehículos del I.E.S. Maria Ibars de Denia.

Esta actividad forma parte de un proyecto de la asociación que se llevó a cabo durante el curso 2018/2019, pero cuyo colofón, la instalación del vehículo a la entrada del Parque Natural del Montgó, ha debido esperar a causa de la pandemia de la Covid-19.

Según señalan desde la asociación, los objetivos del mismo han sido, en primer lugar, impulsar la participación de las empresas asociadas en el fomento de la arqueología industrial; en segundo lugar, colaborar con el I.E.S. María Ibars, aportando medios materiales para favorecer la formación y motivación de los jóvenes, y por último, participar en el embellecimiento del municipio de Denia.

La máquina restaurada es, en concreto, una apisonadora adquirida en 1960 por la Hermandad Sindical de Labradores y Ganaderos de Denia para el arreglo de los caminos agrícolas del municipio, “cuando aún la agricultura tenía un peso importante en la economía de la zona”, según refleja la asociación.

En 1964, conforme a indagaciones de miembros de Asetrama, el viejo motor original Baudouin de la serie DB2 de dos cilindros fue sustituido por un motor Perkins modelo HL de 1.500 rpm, que sigue instalado actualmente. Además, fue retirada definitivamente de servicio en 1997 y olvidada en un rincón.

Según indican desde Asetrama, ahora la vieja apisonadora, situada junto al Centro de Interpretación del Parque Natural del Montgó, quiere “unir el eco de una actividad que cayó en el más absoluto abandono con un presente y un futuro que no deben olvidar las raíces de lo que somos”.

“No es casualidad que haya sido Asetrama quien haya querido rescatar del olvido la vieja máquina: muchos de los que han participado en el proyecto fueron o son profesores o alumnos de automoción del centro formativo, y son o serán propietarios y trabajadores de los talleres de la zona”, ha señalado Guillermo Bellot, secretario de la asociación.

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