Según informa Melilla Hoy, a principios del mes de febrero la asociación ecologista Guelaya denunció el abandono de numerosos neumáticos usados en varias zonas verdes de la ciudad, con especial atención en la Pista de Carros. Varios miembros de la entidad fotografiaron los neumáticos que tenían inscrito el mensaje ‘SOS’.
Asimismo, también alertaron de que se están arrojando ruedas en los cauces de los ríos, lo que formará “peligrosos tapones o arderán en pavorosos incendios antes de llegar al mar”. El motivo del abandono es que “ninguna” de las personas que actualmente importa neumáticos de segunda mano de países extranjeros como Alemania o Países Bajos para venderlos en Melilla paga la ecotasa. Este impuesto fue creado en 2006 en base al Real Decreto (RD) 1619/2005 que tiene por objeto la financiación del tratamiento de los neumáticos fuera de uso.
El propietario de un taller de neumáticos ha explicado al diario que “los neumáticos nuevos puestos en el mercado, cuando tú lo compras a un proveedor en la península o en cualquier parte, tú estás pagando el neumático y él te está metiendo la ecotasa, igual que cuando (te incluyen) el IVA”. Además, esta persona cifra el impuesto en torno a 1’33 euros.
Cómo proceder
- Antes de adquirir el neumático el importador debe abonar la ecotasa y posteriormente, se le suma el aforo y la ecotasa y se le pone el margen de beneficio.
- Una vez que un taller acumule ciertos neumáticos y desee deshacerse de ellos, debe hacer la petición de recogida en la página web de ‘Signus’, el taller solicita la retirada de los neumáticos, lo programa, tienen que descargarse el documento de identificación e imprimen el volante de recogida de ‘Signus’ “para que quede constancia de que se le ha retirado dicho neumático”.
- Finalmente, el neumático se deposita en un punto limpio.
Gasto de la Ciudad Autónoma
“Se merma las arcas públicas a favor de unos pocos, que en este caso son tres o cuatro importadores”, denuncia el propietario del taller, hablando de “cantidades desorbitadas”, ya que asegura que “cuesta mucho de la parte de la Ciudad Autónoma de manipular esos neumáticos, recogerlos, enviarlos a la península por el coste que supone”, que viene a ser alrededor de 50 toneladas que se recoge en dos meses por cerca de 20.000 euros.
“Y eso sale de nuestras arcas públicas cuando hay unos fondos a nivel nacional que están gestionados para el uso y la recogida de neumáticos usados”. Añade que, la Consejería de Medio Ambiente cuenta con la herramienta necesaria para que estos importadores “no se salten las normas”, exigiéndoles a estos últimos el justificante de pago de la ecotasa recogida en los neumáticos fuera de uso antes de que hagan el despacho de aduanas, tal y como dice la ley si eres importador de neumáticos.
