AS-PL ha ampliado su catálogo de sensores NOx con 100 nuevos modelos y ahora existe la posibilidad de adquirirlos en su página web. Estos productos son un componente muy importante del sistema de reducción catalítica selectiva (SCR) y permiten medir continuamente la concentración de sustancias nocivas.

Ecología y sistema SCR 

Uno de los compuestos más peligrosos que entran en la atmósfera es el óxido nítrico, que reacciona con el oxígeno formando dióxido de nitrógeno venenoso. Según la Comisión de Investigación sobre la Medición de las Emisiones del Sector del Automóvil, cada año, el dióxido de nitrógeno causa 400.000 muertes prematuras en toda la Unión Europea. 

El problema es grave y el Parlamento Europeo endurece constantemente los requisitos de las normas de emisión de los nocivos óxidos de nitrógeno. Los fabricantes buscan diferentes soluciones, una de ellas es la instalación de sistemas especializados que ayudan a reducir considerablemente la emisión de compuestos tóxicos a la atmósfera.

Uno de estos sistemas es el SCR (Selective Catalytic Reduction). Este sistema se encarga de transformar las partículas de óxido nítrico en agua y nitrógeno inyectando solución AdBlue en el catalizador SRC. Uno de los componentes del sistema son los sensores NOx montados directamente en el sistema de escape. Se encargan de medir continuamente la concentración de óxidos de nitrógeno en los gases de escape. Los datos obtenidos se envían al módulo y, basándose en ellos, se controla el funcionamiento del motor y la dosificación de AdBlue.

Diseño y funcionamiento de los sensores NOx Los sensores NOx son un componente muy importante del sistema de reducción catalítica selectiva. Para comprender mejor su papel en la reducción de las emisiones de óxidos de nitrógeno es bueno saber de qué están construidos.

Componentes de un sensor 

• Una sonda de medición con un sensor electroquímico (incluye dos cámaras de medición).
• Un cable de conexión entre la sonda y la unidad de control.
• Un módulo de tratamiento de datos de la sonda.
• Un enchufe que conecta el sensor al ordenador de la ECU. Los sensores NOx son uno de los componentes más importantes del sistema SCR complejo.

Funcionamiento del sensor

Al situar los sensores NOx en el sistema de escape en la entrada y en la salida del sistema SCR, es posible medir continuamente la concentración de sustancias nocivas. El primer sensor recibe una muestra de medición de los gases de escape, que ya han sido sometidos a un proceso de limpieza DOC/DPF. El sensor NOx situado en la salida está diseñado para controlar el rendimiento del catalizador SCR, que debe reducir la cantidad de compuestos tóxicos hasta un determinado nivel. A base de ambas mediciones, se calcula la cantidad necesaria de inyección de urea (AdBlue) para reducir al máximo el contenido de sustancias nocivas. 

Fallos de los sensores NOx

Uno de los problemas más comunes es una bomba de AdBlue defectuosa responsable de la presión correcta de la urea inyectada y el fallo del calentador del depósito de AdBlue. Otro problema común es la deposición de hollín en el elemento de medición, causada, por ejemplo, por la mala calidad del combustible o el aumento del consumo de aceite del motor. 

Dependencia de otro componente

Debido a su delicado diseño, también pueden producirse daños mecánicos o eléctricos. La abrasión de los cables, un cortocircuito o un golpe de una pequeña piedra, por ejemplo, pueden dañar considerablemente el sensor.

La humedad también afecta al estado de los cables, por lo que algunos componentes pueden corroerse y la electrónica dañarse. La propia urea también debería añadirse a la lista de culpables del fallo del sensor. El uso de líquido AdBlue de origen desconocido o de mala calidad hará que el sensor, y probablemente todo el sistema SCR, necesite ser reemplazado.

Los síntomas de un sensor NOx defectuoso incluyen

• Fluctuación de velocidad durante el arranque en frío.
• Mayor consumo de gasolina.
• Mayor consumo de aceite del motor.
• Sacudidas al arrancar.
• Problemas con el sistema DPF.

¿Cómo protegerse de una avería?

Durante la inspección anual merece la pena prestar atención a las bujías y al estado del sistema de escape. En caso de un fallo mayor será necesario realizar un diagnóstico informático para descartar por completo un problema en el sensor.

La reparación del sensor debe realizarse por un especialista con el equipo adecuado. Los sensores NOx no deben estar apilados durante el almacenamiento y tampoco pueden estar atados, doblados ni retorcidos. Tampoco se pueden pintar, lavar con agua ni abrir. También está prohibido el contacto de los sensores con disolventes y otros productos químicos.