El confinamiento decretado como consecuencia del Covid-19 ha hecho que las ventas de vehículos usados haya caído el 90% en abril y se hayan registrado 17.667 unidades, según datos de Ideauto para Ganvam. De esta forma, el primer cuatrimestre acumula un retroceso del 25,5% con un total de 530.638 unidades.

Con estos datos, la patronal prevé que este sector cerrará el año con una caída cercana al 30%, lo que supone situarse en unas 1,5 millones de operaciones, volviendo a cifras de 2008.

Las cifras también muestran cómo las ventas de usados procedentes de flotas comienzan a perder la inercia que las empujaba en los meses anteriores como consecuencia de que en abril sus ventas se desplomaron el 84,5%, hasta situarse en 2.337 unidades.

Así, los vehículos de entre tres y cinco años, que venían registrando crecimientos de dos dígitos, invierten la tendencia y acumulan un descenso del 9% hasta abril, con un total de 53.574 unidades.

Los usados de más de diez años son los que más han caído, con un descenso del 30,3% en el primer cuatrimestre, pero siguen siendo el 54% del mercado (cuatro puntos menos que en el mismo periodo del año anterior). Solo en abril cayeron el 90%, con un total de 9.657 unidades.

Por otro lado, los vehículos diésel son los que más han caído (29,5% en el primer cuatrimestre), seguidos de los de gasolina (20,7%). Frente a esto, los eléctricos han aumentado sus ventas el 41,8% registrando 1.096 unidades vendidas.

Según el presidente de Ganvam, Raúl Palacios, “las ventas registradas durante el confinamiento son operaciones cerradas con anterioridad y cuya transferencia se ha tramitado más tarde, vehículos importados y en menor medida, ventas online”.

“La cuestión es que mientras no esté controlada la pandemia y se puedan ampliar las restricciones de circulación, la actividad económica no va a crecer. Es decir, por mucho que abran los establecimientos, la reactivación del consumo dependerá del grado de movilidad que se le permita al ciudadano y, por supuesto, de las medidas que se pongan en marcha para dotar de confianza a ese consumidor. Por eso, urge la puesta en marcha de planes de incentivo que también ayuden a las rentas más ajustadas”.

Por regiones, Baleares es donde más caen las ventas con un descenso del 36,3% y Madrid, donde menos con un descenso del 18,9%.