El acuerdo alcanzado entre el Gobierno, empresarios y sindicados para proteger el empleo y prolongar la duración de los ERTE hasta el próximo 30 de junio, ha sido visto como un avance, pero insuficiente para dos de las principales patronales del sector: Ganvam y Faconauto.

Así, Raúl Palacios, presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), ha calificado esta negociación como un "avance" ante el riesgo de que el Gobierno legislara por su cuenta.

El representante de la patronal ha expresado que la prórroga de los expedientes de regulación temporal de empleo, "permitirá proyectar certidumbre en la economía española en un momento de extrema dificultad, en el que haberse levantado de la mesa sin conseguir nada nos hubiera abocado a una situación mucho peor".

La crisis del coronavirus ha provocado el cierre de los negocios por una caída de la actividad como consecuencia de las restricciones en movilidad. La vuelta al trabajo está siendo gradual, por ello, se pone de manifiesto la necesidad de una reincorporación del personal de forma ajustada. La ampliación de los ERTE hasta el 30 de junio no satisface las expectativas del presidente de Ganvam, pero sí valora que se abra la posibilidad de un nuevo proceso de negociación basado en la protección de las empresas y trabajadores más vulnerables.

"En una crisis tan extraordinaria como esta abogo por la crítica constructiva y la unidad empresarial más que por la batalla encarnizada para poder dar pasos hacia adelante; porque, de lo contrario, si optamos por la inflexibilidad, estaremos en una posición muy débil frente al Gobierno", ha concluido Raúl Palacios.

En la misma línea se ha manifestado Faconauto, que valora el nuevo consenso alcanzado entre CEOE y los sindicatos, ya que el diálogo social será siempre la mejor herramienta para lograr una salida ordenada y efectiva de la crisis, pero considera "claramente insuficiente" que la extensión de los ERTEs por causa de fuerza mayor se extiendan sólo hasta el 30 de junio y espera que en las negociaciones previstas se pueda mejorar este y otros aspectos para dar viabilidad a un sector clave como es la distribución y reparación de vehículos.

La patronal recuerda que actualmente hay 108.000 trabajadores de los concesionarios acogidos a ERTEs por causa de fuerza mayor, en un contexto en el que se prevé una caída en las matriculaciones de vehículos que superará el 40% al finalizar el ejercicio. Con esta caída en la actividad, Faconauto ve inviable que en julio se den las condiciones necesarias para incorporar a la totalidad de sus plantillas. De tener que asumir esta incorporación, se conseguiría el efecto contrario al deseado: una fuerte destrucción de puestos de trabajo y el cierre de muchas empresas.