Chapa y pintura | Tipos y características de las carrocerías de los automóviles

Los fabricantes usan las autoportantes para turismos y las de chasis independiente para camiones y autobuses.

Existen dos tipos de carrocerías, las de chasis independientes y las autoportantes.
Existen dos tipos de carrocerías, las de chasis independientes y las autoportantes.

Confort, seguridad y coste del vehículo son algunos de los elementos que se deben tener en cuenta cuando se analiza la carrocería de un vehículo. Su evolución, con el desarrollo de nuevas tecnologías para su diseño y fabricación, y la introducción de nuevos materiales abren nuevas perspectivas a sofisticados proyectos de los fabricantes.

Uno de los más modernos procesos para generar carrocerías de última generación, según un artículo publicado por GT Motive, es la concepción y fabricación asistida por ordenador. Para llevarlo a cabo, las firmas tienen en cuenta tanto la gama y el mercado al que va dirigido el vehículo, como la reglamentación internacional existente.

Uno de los principales aspectos que los especialistas tienen en cuenta la hora de desarrollar la carrocería es la reducción de la resistencia y conseguir un bajo coeficiente aerodinámico que contribuya a la reducción del consumo del vehículo.

Pero tampoco olvidan la rigidez para potenciar la seguridad, el confort y la durabilidad de la carrocería y reducir el grado de torsión ante un esfuerzo. Esta característica, señala el post, también proporciona menos ruido en el interior del habitáculo y hace que las deformaciones en las puertas y el capó sean mínimas. Sin embargo, una carrocería excesivamente rígida puede provocar que, en caso de colisión, la fuerza que soporten los pasajeros sea mayor.

Asimismo, con el fin de reducir las vibraciones, las enseñas utilizan acanaladuras, materiales de insonorización, variaciones del espesor de pared y de las secciones transversales, entre otros.

Además, los fabricantes tienen presente la forma de facilitar la reparación de las zonas más expuestas a pequeños golpes, optimizando la accesibilidad a puntos de unión y a la chapa desde el interior.

En cuanto a la durabilidad, las compañías emplean materiales más adecuados para evitar la corrosión. Asimismo, dependiendo de la zona en la que se encuentren las piezas de la carrocería, se intenta reducir su masa con materiales más ligeros, como el aluminio.

Por otro lado, el artículo de GT Motive recuerda que existen dos tipos de carrocería. Por un lado, las de chasis independiente que se compone de un de un chasis rígido sobre el que se incorporan las piezas mecánicas y la estructura de la carrocería. Este, que se suele utilizar en todoterrenos, autobuses, camiones y furgonetas, destaca su solidez y resistencia.

En cuanto a las carrocerías autoportantes, están formadas por diversas piezas unidas por puntos de soldadura por resistencia. En este caso, la chapa soporta toda la carga estructural del vehículo, por lo que es importante la fuerza que ejercen las piezas entre sí para aportar una buena rigidez.

Su mayor flexibilidad, que permite una deformación progresiva y controlada en caso de impacto, hace que sea la carrocería escogida por la mayoría de los turismos.

Cerrar

Inicia sesión con email

He olvidado mi contraseña