Los ingresos en la venta y reparación de vehículos cayeron reseñablemente en el arranque de 2023, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y recogidos mensualmente por Fagenauto. No obstante, aunque la facturación, en el mes de enero, cayó un nada desdeñable 11,5% frente a la de diciembre, ésta aún fue casi el 22% mejor que la registrada en enero de 2022, en concreto, el 21,9% mejor.

Un registro que supone la mayor diferencia anual en el primer mes del año desde el arranque del milenio, pues nunca desde el año 2000 en un mes de enero, los ingresos del sector crecieron tanto frente al enero anterior. 

Además, este dato es también superior al registrado por el Sector Servicios en su conjunto, cuya cifra de negocio global aumentó el 12,9% anual en el primer mes del año, pese a que la facturación cayó el 13,8% respecto a diciembre.  

Los precios de los vehículos benefician a la venta

A pesar de la caída de las matriculaciones, las empresas dedicadas sobre todo a la venta de vehículos,  presentan también mejores datos que las que tienen en el mantenimiento y reparación de vehículos su principal actividad. Algo que podría tener su explicación en los precios disparados de los VN y de los VO que tiraron de la cifra de negocio de las primeras hasta incrementarla el pasado enero el 22,8% frente al mismo mes de 2022, cuando la facturación se desplomó un 12,5% en comparación con la de un mes antes.

Por su parte, el mantenimiento y reparación de vehículos, con una factura que continúa también con una evolución inflacionista, si bien no tan acusada como la de los vehículos, también registró un aumento de su cifra de negocio del 16,3% anual en enero (por encima del incremento registrado por el Sector Servicios en su conjunto), si bien la facturación cayó igualmente frente a la diciembre, aunque en menor medida: el -4,3%.