Dentro de la denominada operación Cajón, la Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal, con base en la provincia de Málaga y ramificación en Granada, dedicada al transporte de sustancias estupefacientes, informa granadahoy.com. La organización contaba en la provincia de Granada con un taller clandestino, donde confeccionaba caletas o dobles fondos a los remolques frigoríficos. La intervención policial ha llevado a la detención de 12 personas y a la intervención de más de 415 kilogramos de hachís, 291 plantas de marihuana, dos cabezas tractoras y cuatro remolques -dos de ellos caleteados-, tras los 5 registros efectuados en Estepona, Málaga, Sanlúcar de Barrameda, Granada y Almería. Esta organización, además, disponía de una flota de vehículos industriales –algunos de ellos previstos de dobles fondos- que utilizaban para la importación de la mercancía ilícita.
La investigación la llevaron a cabo agentes del Grupo de Crimen Organizado de la Comisaría Local de Fuengirola, conjuntamente con especialistas del Grupo II de Estupefacientes de la Comisaría Provincial de Málaga, y se centró sobre la posible existencia de una organización criminal que ofrecía sus servicios como transportistas a organizaciones de narcotraficantes. Para ello, contaban con una importante infraestructura de cabezas tractoras y remolques, que habían sido modificados con doble fondo para la ocultación de la mercancía, e importaban la droga a través de transportes internacionales que realizaban con empresas lícitas.
Durante el desarrollo de la primera parte del dispositivo los agentes localizaron una cabeza tractora que, posiblemente, participaría en una transacción de droga, en un descampado en la carretera de Fuengirola-Mijas. Poco después, vieron aproximarse varios turismos, que se colocaron estratégicamente alrededor de la tractora para ocultar al resto de usuarios de la vía sus maniobras. Tras ello, los ocupantes transvasaron cinco fardos de arpillera hacia el habitáculo de la cabeza tractora.
Una vez en movimiento, los agentes de la Policía interceptaron la comitiva (la cabeza tractora y una furgoneta que realizaba labores de contra vigilancia) a la altura del término de Vélez-Málaga. En el interior del vehículo fueron localizados y aprehendidos 188 kilogramos de hachís. Intervenida la carga intervenida, el resto de agentes del dispositivo detuvieron en Málaga y Estepona al resto de los miembros de la red.
Remaches delatores
Tras esta primera actuación, se estableció un mes después un dispositivo de vigilancia sobre otra cabeza tractora y un remolque frigorífico, los cuales se dirigían a Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), posiblemente para la carga de una nueva partida de hachís. Ante las sospechas, los agentes interceptaron los transportes y realizaron una inspección minuciosa. Unas desigualdades en los remaches de los embellecedores del remolque delataron un doble fondo muy bien elaborado, donde ocultaban 227 kilos de hachís.
Tras este nuevo golpe, se sucedieron el resto de detenciones, así como registros en Almería, donde residían los principales investigados, en una nave en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), donde cargaron el remolque y donde se localizó una plantación indoor de marihuana, y en una nave de Granada, donde la organización tenía un taller clandestino que usaban para confeccionar caletas en remolques frigoríficos.
