Agentes de la Guardia Civil, de los Mossos d’Esquadra y de la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal dedicada al tráfico internacional de marihuana. La investigación se inició en abril del año pasado, cuando los tres cuerpos policiales comenzaron a tener sospechas de que en una nave industrial de Sant Andreu de la Barca (Barcelona) se estaban llevando a cabo actividades relacionadas con el narcotráfico. En concreto, se trataba de un taller mecánico que la organización utilizaba como centro de operaciones para aparentar normalidad y desviar la atención de sus actividades delictivas.

Asimismo, el establecimiento servía como almacén de la droga ya procesada y como centro de pesaje, terminal de carga y ocultación a bordo de camiones que más tarde la distribuían a distintos países europeos, especialmente a Francia, Alemania y Polonia, para su entrega a los compradores.

Según ha revelado la Guardia Civil, la organización se dividía en tres subgrupos, dos de los cuales estaban integrados por ciudadanos alemanes y holandeses de origen árabe, que se encargaban de contactar con proveedores de marihuana en diferentes zonas de Cataluña, como San Cosme, La Mina, Gavà, Viladecans y Tarragona. Por lo visto, negociaban con ellos y comprobaban la calidad de la droga que adquirían antes de almacenarla y enviarla en camiones a su destino.

El tercer grupo lo componían ciudadanos españoles y marroquíes, que se dedicaban al cultivo de las plantaciones de marihuana, a la intermediación con los proveedores y a la administración del taller mecánico de Sant Andreu de la Barca, donde envasaban al vacío la droga para su transporte y distribución.

Tras varias operaciones de interceptación de transportes desarrolladas desde diciembre del año pasado, la llamada operación “Delos” ha concluido con el operativo policial llevado a cabo en la madrugada del jueves día 15. En él se realizaron once registros y se intervinieron 200 kg de marihuana procesada, 1.000 plantas en diferentes estadios de crecimiento, 85 de hachís, 106.000 euros, ocho coches, tres camiones, una pistola de balines que simulaba ser un arma de fuego real, balanzas, utensilios para la manipulación y envase de la droga, documentación y dispositivos electrónicos.

Asimismo han resultado detenidas 15 personas de diferentes nacionalidades por la presunta comisión de los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal, y una investigada, entre los que se encuentran los cabecillas, los suministradores de la droga y los transportistas. En su conjunto son vecinos de Barcelona, l’Hospitalet de Llobregat, Esparraguera, Castellbisbal, Sant Vicenç dels Horts y Blanes.