La situación de alegalidad en la que se encuentran los talleres móviles es un motivo de preocupación para los talleres de reparación, y así ha sido expuesto por patronales del sector, como Conepa.

En el caso de Castellón, los talleres móviles se están convirtiendo en una seria amenaza para los talleres legales, puesto que están proliferando los reparadores piratas que montan campas en móviles para ejercer la actividad de forma ilegal.

Según publica la prensa regional, la asociación de talleres de Castellón, Astrauto, afirma que “el asunto de la clandestinidad es una de nuestras prioridades a la hora de denunciar y ponerlo en manos de las autoridades y, desde luego, este problema se añade a los que ya venimos denunciando con los talleres ilegales en locales fijos”.

El modus operandi consiste en montar y desmontar los talleres móviles en una misma jornada, preferiblemente en polígonos industriales y previo contacto con el cliente, de modo que eludir las inspecciones de control es fácil.

Tal y como explica Julio del Rosal, presidente de Astrauto, para poder realizar las reparaciones en un día, en la mayoría de los casos se trata de “labores de mantenimiento, como es el caso de la corrección de niveles, ajustes, cambios de neumáticos o reconocimientos de pre-ITV”.

Además de la seria amenaza que suponen los talleres móviles ilegales para los negocios legalmente constituidos, estas prácticas conllevan un riesgo para el medio ambiente, puesto que no existe ningún tipo de control sobre los vertidos y los residuos.