Bridgestone ha anunciado sus resultados económicos del pasado ejercicio, en el que ha obtenido un un beneficio neto atribuido de 2.165 millones de euros, lo que supone una subida del 8,6% respecto a 2016, según datos publicados por la empresa y que recoge Europapress.es.

De acuerdo con la compañía, en estos resultados ha repercutido la mayor debilidad del yen, en comparación con los datos de 2016, así como el incremento del precio de las materias primas, aunque señalan que se beneficiaron del mayor volumen de producción mundial de vehículos.

Por otro lado, la firma asiática contabilizó una cifra de negocio de 27.373 millones de euros entre enero y diciembre del año pasado, lo que se traduce en un incremento del 9,2% en comparación con el año previo.

En cuanto al beneficio operativo, este se situó en 3.148 millones de euros en el conjunto del año pasado, registrando una disminución del 6,8% al compararlo con el ejercicio anterior.

Para 2018, Bridgestone espera mejorar un 6,8% su beneficio neto atribuido anual, hasta los 2.314 millones de euros, y prevé lograr una facturación 28.549 millones de euros, un 4,3% más.