Rodi Motor Services ha elaborado un protocolo de protección y prevención para aplicar en todos los talleres de la red con el fin de asegurar que sus centros son talleres seguros, tanto para clientes como para empleados.

Para lograr el objetivo de ser un taller seguro, estos centros de reparación se limpian y ventilan diariamente, y cuentan además con dosificadores de líquido desinfectante en las zonas comunes. También se desinfectan los objetos y maquinarias empleadas.

En lo que respecta a la atención de los clientes, el taller dispone de pantallas de metacrilato colocadas en las zonas de recepción, respetando también el aforo máximo y la distancia de seguridad entre personas.

Los talleres Rodi atienden a sus clientes con cita previa, de forma que realizan una atención personalizada. Como medida requerida para la apertura de las instalaciones, han dispuesto un horario de atención preferente para mayores de 65 años.

Los profesionales recomiendan a los clientes el uso de mascarilla y guantes, aunque aseguran que cuentan con guantes desechables para los usuarios en todos los centros. Los clientes deberán permanecer en la recepción o en las zonas habilitadas para ello, y se recomienda el pago con tarjeta de crédito o a través del móvil.

En el caso de los profesionales, los empleados de Rodi desempañan sus funciones con guantes y mascarillas que se cambian de forma periódica. Los trabajadores mantienen la distancia de seguridad y los clientes no pueden acceder a las zonas de trabajo internas del taller.