La llegada de vehículos eléctricos está suponiendo en el sector un elemento de cambio, tanto en la normativa en el uso de automóviles como en la formación para los talleres, así como en las infraestructuras que, poco a poco, deberán irse adaptando a las necesidades que plantea este nuevo tipo de movilidad.

Pese a que desde algunos sectores se ve este nuevo tipo de coches como una amenaza, empresas como First Stop, perteneciente a Bridgestone, asegura que ve una oportunidad de negocio en este ámbito, según publica El Mundo.

Así, José Manuel Ledo, director general de la red de talleres afirma que quieren asociar sus establecimientos con una red de recarga de vehículos eléctricos en los 416 talleres (propios y franquiciados) que posee la marca en España y Portugal.

De momento, ya cuenta con 36 puntos de carga activos (de 22 kW), aunque el objetivo es llegar a 60 en el primer semestre de 2019 y a 100 a finales del mismo.

Las ciudades de Barcelona, Madrid, Bilbao, Sevilla, Málaga, Valladolid o Córdoba ya poseen servicios de esta firma para coches eléctricos. Además, la enseña apunta que, aunque en esta primera etapa pretenden electrificar el 25% de la red, ya es posible hacer una ruta por el Mediterráneo en automóvil eléctrico recargando en los centros First Stop.

Por otro lado, la empresa destaca su servicio de asistencia en carretera si los vehículos se quedan sin batería. Para ello, posee 120 furgonetas, las cuales, además de la carga de emergencia, hacen pequeñas reparaciones. De ellas, seis son 100% eléctricas, por lo que pueden acceder a zonas de restricciones como Madrid Central.

Asimismo, Ledo subraya que poseen motos eléctricas para atender pequeñas reparaciones, hacer una recarga puntual o ir a por un vehículo. Aunque este servicio sólo está disponible en Madrid, la idea es trasladarlo a otras ciudades.