El fabricante estadounidense de suspensiones neumáticas para vehículos de alta gama Arnott ya cuenta con su sede en Europa —en los Países Bajos—, desde donde podrán suministrar sus productos a distribuidores mayoristas y talleres europeos.

Tras un "año de duro trabajo" para preparar el lanzamiento de su actividad en el Viejo Continente, según el CEO de Arnott Europa Goswin de Rouw, “todo el esfuerzo ha culminado con 400.000 copias del catálogo de productos para 2015/2016, que ha sido traducido a seis idiomas y puesto a disposición de talleres y distribuidores en los Países Bajos, Bélgica, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y España”.

El mercado de reposición de suspensión neumática para vehículos de lujo y remanufacturados está en continuo crecimiento, según el fabricante. Por motivos de seguridad y confort, la mayoría de los coches de gama media incorporan ya este sistema.

Precisamente por eso, existía “cierto escepticismo” en las posibilidades de venta que se presentaban a Arnott. Sin embargo, “una vez que los importadores y distribuidores empezaron a vender nuestros productos, se dieron cuenta del nivel de demanda y de las posibilidades de mercado que realmente existen”, ha asegurado De Rouw.

Según la compañía, su fuerza radica en el soporte que ofrecen a sus clientes, tanto en información de productos como en su montaje. "No solo suministramos las piezas, sino que también las fabricamos y las adaptamos", afirma Ronald Jacobs, CEO de Arnott Europa.

"Documentamos la información y compartimos cómo se hace con quien lo necesite, lo que nos convierte en una empresa con un gran valor añadido", añade Jacobs.

Arnott Europa cuenta con 14 empleados en plantilla y departamento propio de I+D, desde donde conciben y desarrollan sus nuevas soluciones.