Un dispositivo que permite controlar los principales sistemas de comprobación y diagnóstico de Bosch y se puede convertir en un PC portátil. Así es la última novedad que ha presentado Bosch, su unidad de control de diagnosis DCU 220, que combina las características de un laptop con las de una tableta, facilitando el trabajo en el taller.

Cuando se utiliza como tableta, su pantalla táctil de 11,6 pulgadas permite trabajar de manera rápida, práctica y flexible, según explica Bosch. Como portátil se puede utilizar tanto de manera estacionaria dentro del taller como para cualquier trabajo de oficina, como por ejemplo la consulta y toma de datos de los clientes.

Bosch asegura que sus equipos de diagnosis KTS 570, KTS 540, KTS Truck, FSA 500, el analizador de emisiones BEA y el alineador de ruedas FWA, entre otros, son totalmente compatibles con la nueva DCU 220.

Si se emplea junto con los programas Esitronic 2.0 y CompacSoftplus, el DCU 220 puede controlar todos los sistemas de diagnosis y comprobación mediante conexión Bluetooth, tal y como detalla el fabricante.

Cuenta con dos baterías de iones de litio independientes que permiten trabajar sin interrupciones, cámara HD, procesador Intel Core i5 de cuarta generación, un disco SSD integrado, conexión wifi y sistema operativo Windows 7 Profesional adaptado para Bosch.