Electromecánica | Bosch desarrolla el DCI 200, un banco de pruebas de inyectores Common Rail para turismos y camiones

Cuenta con un diseño ergonómico y un funcionamiento intuitivo. Además de un novedoso sistema de medición.

El operario puede permanecer de pie en el banco de pruebas, sin tener que agacharse para sujetar los inyectores
El operario puede permanecer de pie en el banco de pruebas, sin tener que agacharse

Bosch ha desarrollado el DCI 200, un banco de pruebas de inyector Common Rail unitario. Al igual que el DCI 700, puede probar de forma precisa y fiable inyectores para turismos y camiones.

Gracias a su nuevo sistema de medición, también se puede utilizar para probar inyectores equipados con los últimos sistemas de control de inyección, tales como el control de cierre de válvula (VCC) y el control de cierre de aguja (NCC). Un control electrónico de circuito cerrado garantiza la precisión en la medición de los inyectores con VCC y NCC durante toda su vida útil y cumple con los estándares de emisiones vigentes.

El montaje y desmontaje de un inyector de turismo o camión en el banco de pruebas, dura menos de un minuto. El tiempo necesario para probar un inyector ya colocado es, por lo tanto, de 15 minutos como máximo. En general, el sistema es fácil de usar, debido también a que ya no se necesitan mangueras de alta presión. Además, las actualizaciones de software y datos para los programas de prueba se pueden descargar online.

Los ingenieros de Bosch han dado gran importancia a que los flujos de trabajo sean eficientes y ergonómicos, así como a que el funcionamiento sea intuitivo. El operario puede permanecer de pie en el banco de pruebas, sin tener que agacharse para sujetar los inyectores. Además, la base biselada del DCI 200 le permite al mecánico estar más cerca del banco de pruebas.

Talleres especializados

Los talleres diésel de Bosch en todo el mundo están especializados en el mantenimiento y reparación de sistemas de inyección diésel, así como en la reparación de sus componentes individuales. "Todos los empleados del taller han recibido una formación especial y tienen al alcance de sus manos los últimos equipos de diagnosis y prueba, así como las herramientas especiales necesarias. Su alto nivel de conocimientos y experiencia en diésel, que en la mayoría de los casos se extiende a lo largo de muchos años, significa que disfrutan de una excelente reputación en la industria", concluyen desde Bosch.

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