Durante los ocho primeros meses del año, la producción española de vehículos alcanzó las 1.970.098 unidades. Ello supone un crecimiento del 5,11% respecto al mismo periodo del año pasado.

En julio y agosto se mantuvo la tendencia al alza de los meses pasados, con más de 340.000 vehículos producidos. En julio, la producción de vehículos alcanzó las 241.372 unidades, un 4,4% más que en el mismo mes de 2017. En agosto, se fabricaron 99.065 vehículos, un fuerte incremento del 25% respecto al agosto anterior. 

Los turismos llegaron a las 1.552.361 unidades fabricadas entre enero y agosto, un ascenso del 5% respecto al mismo periodo de 2017. Por su parte, el crecimiento acumulado de los vehículos comerciales e industriales en los ocho primeros meses del año es del 4,8%, con 382.966 unidades.

Los todoterrenos poseen el mayor ritmo de producción acumulado en este periodo, con 34.771 unidades producidas, lo que supone un incremento del 14,86% respecto a los ocho meses primeros del año anterior.

Por tipo de vehículo y mes, los turismos y vehículos comerciales e industriales han vivido realidades diferentes en función del mes. En julio la producción de turismos cayó un 1,1%, con 179.869 unidades producidas, mientras que en agosto creció un 44% hasta las 80.315 unidades.

En cuanto a los vehículos comerciales e industriales, en julio han crecido un 23,4% con un total de 56.787 unidades. Mientras, en agosto redujeron su producción un 22,76% hasta las 16.788 unidades.

La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) considera que estos datos son "muy positivos y demuestran el esfuerzo constante que llevan las plantas productoras españolas para adaptarse a las demandas y novedades del mercado".

Esta evolución positiva de la fabricación de vehículos en España se ve reflejada, como consecuencia, en el auge de la exportación de vehículos fabricados en España, que entre enero y agosto alcanzó las 1.608.668 unidades, un 5,7% más que en esos ocho meses de 2017. Entre los destinos de exportación, se ven importantes crecimientos en las ventas a Portugal, Francia, Alemania, países Bajos, los mercados del este de Europa, los del norte de África y Oceanía. Como contraparte, destaca la caída de las matriculaciones en el mercado turco y los menores volúmenes de exportación hacia Asia.