Las nuevas exigencias en materia de emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los vehículos tendrán un impacto negativo sobre las clases con ingresos medios y bajos, según Acea.

No obstante, los principales fabricantes de automóviles en Europa han reiterado su compromiso a largo plazo con la reducción de dichas emisiones, aunque señalaron que esta transición solo se puede llevar a cabo con una movilidad individual asequible para todos los ciudadanos.

Por ello, desde la asociación europea se han posicionado en contra de la imposición de objetivos de reducción a un nivel y una velocidad que no cuenten con el apoyo de la sociedad y han indicado que los objetivos "extremadamente agresivos" del Parlamento Europeo perjudican la "asequibilidad" de la movilidad de millones de europeos.

Los objetivos previstos de CO2, según la patronal, provocarán que los automóviles en la UE sean demasiado caros para las personas con menores recursos económicos.

"La hoja de ruta hacia una movilidad libre de emisiones se ha convertido en un asunto muy sensible para las democracias europeas, ya que los ciudadanos están empezando a sentir el impacto en sus vidas diarias", asegura el presidente de Acea, Carlos Tavares.