Tras la ampliación de plazo, hasta el 21 de abril, concedido por el juez de California Charles Breyer para resolver las reclamaciones civiles relativas a los vehículos afectados por el ‘dieselgate’ en Estados Unidos, parece que el Grupo Volkswagen ha alcanzado un acuerdo con las autoridades del país, que le costará, como mínimo, 10.000 millones de dólares (más de 8.800 millones de euros).

Según una publicación de la agencia Bloomberg, de la que se ha hecho eco Faconauto, la solución al problema del software trucado pasa, en primer lugar, por retirar de la circulación los vehículos afectados.

Sin embargo, las informaciones no aclaran del todo si las reclamaciones civiles interpuestas contra Volkswagen se resolverían completamente con esos más de 8.800 millones de euros.

Lo que sí es seguro es que es una cifra considerablemente superior a los 6.700 millones de euros previstos por la firma inicialmente.

En cualquier caso, esta cantidad solo cerraría los procesos civiles, puesto que las investigaciones del Departamento de Justicia de EE. UU. y las que están en marcha en otros países, continúan su curso.

Por otro lado, la agencia Reuters señala que, según fuentes consultadas, la firma alemana habría alcanzado un acuerdo por el que podría recomprar los 600.000 coches trucados que hay en el país. Y, según la agencia, es una opción con muchas posibilidades.

Por su parte, el periódico alemán Die Welt afirma que Volkswagen habría acordado una compensación de 5.000 dólares a cada propietario de los vehículos afectados por el escándalo de las emisiones contaminantes.

Las horas pasan y el tiempo se agota para Volkswagen, puesto que el magistrado Breyer ha sido rotundo al especificar que, si no cumple con su orden hoy, el tribunal establecerá un calendario para que se celebre el juicio este verano.

Mientras, el grupo automovilístico está lidiando con una demanda por publicidad engañosa en Estados Unidos, al tiempo que, en Europa, la marca ha anunciado el inicio de reparaciones “en breve” de los modelos Audi A4, A5 y Q5, así como del Seat Exeo, después de que las autoridades alemanas dieran luz verde a la solución propuesta el Grupo.