Ganvam ha querido abordra la cuestión sobre si un concesionario cancelado que había suscrito un contrato como servicio posventa para permanecer en la red, puede rescindir la relación con la marca. Inés Hernández, responsable del área jurídica de la asociación, ofrece claridad al respecto.
En primer lugar, Hernández indica que es necesario considerar diversas opciones en esta situación. Una posibilidad es que el contrato institucional mismo establezca un período de dos años durante el cual el concesionario debe notificar al fabricante su intención de rescindir el contrato. En estos casos, el taller se encuentra en una posición delicada, ya que no podría resolver la situación de forma inmediata y "en todo caso, debería existir algún tipo de incumplimiento para que sea el fabricante quien desee cancelar el contrato", señala la experta.
Otro escenario posible es aquel en el que sea el fabricante quien haya incurrido en el incumplimiento. Esto puede suceder, por ejemplo, cuando el concesionario no recibe el respaldo esperado en cuanto a las garantías, lo que le permitiría resolver el contrato de manera más rápida.
La opción más favorable que Hernández aconseja es llegar a un acuerdo mutuo, lo cual beneficia al concesionario porque "le deja indemne ante posibles inversiones que haya realizado u otros gastos que tuviera que afrontar".
En cualquier caso, la experta recomienda buscar asesoramiento y evaluar las opciones, ya que es importante tener en cuenta que el fabricante buscará proteger sus intereses en esta situación y procurará evitar cualquier reclamación posterior por parte del concesionario.
