Preservar nuestro entorno, proteger la naturaleza, cuidar del medio ambiente y buscar una fórmula de sostenibilidad son responsabilidades que deben asumir todas las empresas del siglo XXI.

Pero cuando hablamos concretamente del sector de la automoción, tenemos, además, que perseguir esta máxima, ya no solo desde el punto de vista de la responsabilidad social corporativa, sino desde un punto de vista legal, el cual nos lleva a fijarnos en la Directiva europea 2000/53/CE del 18 de septiembre del 2000, que fue incorporada al reglamento jurídico español mediante el Real Decreto 1383/2002, del 20 de diciembre.

Esta normativa establece, de manera general, la obligación de disminuir significativamente los residuos procedentes de los vehículos y sus componentes, así como la gestión de los mismos cuando se considera que han llegado al final de su vida útil. Además, la directiva insta a los fabricantes a reducir el uso de sustancias peligrosas y a diseñar y construir vehículos y sistemas que faciliten la reutilización y el reciclado.

Es por esto, entre otros factores como la escasez de recursos o la conciencia social, que la economía circular ha ganado peso en el sector durante los últimos años y ha logrado que los fabricantes nos replanteemos nuestros procesos comerciales, situando en el centro la mejora de la calidad y la rentabilidad, así como la garantía de un consumo eficiente y sostenible.

En Cojali, concretamente, hemos incorporado estas cuestiones a nuestra filosofía corporativa, y hemos ampliado nuestro catálogo con productos remanufacturados de calidad similar a los nuevos productos, y a los que dotamos una segunda vida útil mediante la reparación.

Este proceso favorece que, componentes que aún pueden ser utilizados, no sean desechados, puesto que, en muchas ocasiones, la mayor parte de las averías son fácilmente reparables mediante el reemplazo de las piezas en mal estado o con mayor desgaste.

Entre los componentes incluidos en nuestra gama COJALI REMAN pueden encontrarse pinzas de freno, válvulas, sistemas de freno y suspensión o ECUs, cubriendo así gran parte de los componentes de vehículo industrial susceptibles de avería.

Nuestra estrategia es clara: pretendemos promover el consumo responsable, contribuir a la conservación del medio ambiente y, además, favorecer con ello la reducción de costes por parte de los clientes que apuesten por esta alternativa.

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