¿Cuánto tiempo se alargará el estado de alarma en España? ¿Cuándo volveremos a la rutina y los talleres podrán iniciar su actividad con normalidad y no solo en casos de emergencia? Las respuestas a estas cuestiones siguen siendo una incógnita. Sin embargo, un informe elaborado por Boston Consulting Group en base a los estudios de la Universidad John Hopkins (Centro de Recursos Coronavirus) sobre las "proyecciones epidémicas" estima que el bloqueo podría levantarse entre la primera semana de junio y la tercera de julio.

Conclusiones que no resultan muy alentadoras para el sector, pues muchos esperaban que esta situación pudiera revertirse a finales de este mes. Las previsiones de este informe son más alarmistas. De convertirse en realidad, significa que quedan al menos ocho semanas por delante para que la población española pueda retomar el ritmo normal de actividad.

Los expertos prevén que los talleres experimentarán un aluvión de trabajo cuando las personas puedan volver a moverse con normalidad. Sin embargo, quedan por delante largas semanas de falta de trabajo y de clientes en los talleres. Los centros de reparación y mantenimiento tienen la posibilidad de seguir abiertos como servicios esenciales que garantizan la movilidad, y aunque en los próximos días varios grupos de profesionales volverán a retomar su trabajo, las medidas de confinamiento generalizadas suponen un desplome en los ingresos.

En base a las conclusiones de este estudio, los propietarios de los talleres deberán seguir haciendo frente a los pagos fijos durante los meses de abril y mayo. ¿Cómo afrontar esta situación? Solicitar la tramitación de un ERTE se ha convertido en la solución para muchos propietarios, que no ven posible afrontar el pago de la nómina de sus trabajadores. Sin embargo, su lista de pagos pendientes es mucho más extensa. Alquiler de local o préstamo por compra, el pago de autónomos, los gastos del negocio, y un largo etcétera. 

El cierre temporal de los negocios no exime a sus dueños de hacer frente a unos gastos fijos. Son muchos los profesionales que escriben a Infotaller ofreciendo su punto de vista y compartiendo algunas de las acciones que pondrán en marcha para paliar esta dura situación. En primer lugar, un alto porcentaje ha optado por cerrar el taller y no prestar servicio esencial, con el objetivo de obtener la aceptación del ERTE solicitado. Además, la gran mayoría coincide en la importancia de retener toda la tesorería posible en estas semanas y realizar un exhaustivo control de gastos.

Hay empresarios y autónomos del sector de la automoción que han confirmado a Infotaller que llevarán a cabo previsiones a corto y medio plazo, teniendo en cuenta un periodo aproximado de uno a seis meses, y en caso de problemas de tesorería recurrirán a pedir préstamos ICO que garanticen la viabilidad del negocio de cara a estos próximas semanas. También los autónomos estudian la posibilidad de solicitar la nueva prestación extraordinaria por cese de actividad. Y en el lado opuesto se sitúan pequeños negocios que ya venían sufriendo problemas en los últimos meses y para los cuales este duro bache supondrá echar el cierre a su negocio de forma definitiva.