La contaminación en las grandes ciudades se ha convertido en los últimos tiempos en un serio problema que ha provocado que las diferentes administraciones comiencen a tomar serias medidas para intentar reducir los índices de polución.

Así, a las regulaciones de urbes como Madrid y Barcelona ahora se unen los municipios de más de 75.000 habitantes de la Comunidad de Madrid, según publica el Boletín Oficial autonómico, con el ‘Protocolo Marco de Actuación durante episodios de alta contaminación por Dióxido de Nitrógeno (NO2) en la Comunidad de Madrid’.

Mediante dicho decreto se establece que las localidades que supere la población indicada deberán elaborar su propio protocolo de actuación en el plazo de un año.

El mencionado protocolo divide a la región en siete zonas y establece tres niveles de actuación: información y preaviso, aviso y alerta. El primero se producirá cuando en dos estaciones de una misma zona se registren más de 180 microgramos por metro cúbico de NO2 durante dos horas consecutivas.

Se pasará al nivel de ‘Aviso’ en el caso de que dos estaciones de una misma zona registren más de 200 microgramos por metro cúbico de NO2 y al de ‘Alerta’ si en una sola estación se registran más de 400 microgramos durante tres horas consecutivas.

No obstante, la capital de esta comunidad tiene otro tratamiento, ya que el nivel de ‘Alerta’ se decretará cuando se superen los 400 microgramos por metro cúbico de NO2 durante tres horas consecutivas en tres estaciones. Si este nivel se supera en la zona que corresponde con El Pardo y la Casa de Campo, bastará con que se detecte en dos estaciones de medición para activarlo.

Estos niveles darán lugar a cuatro escenarios que se irán poniendo en marcha en función de la situación existente. Entre las principales medidas se encuentran las informativas a administraciones y ciudadanos, promoción del transporte público y restricción del tráfico con limitaciones de velocidad dependiendo de los tramos de circulación.

Asimismo, está previsto que puedan producirse restricciones ciertos en sectores productivos, como operaciones que generen contaminación en obras públicas o que se establezcan planes de movilidad en empresas de más de 250 trabajadores.

Ante la previsión de estas medidas en la región, Asetra subraya que estará pendiente de las actuaciones que se vayan desarrollando los municipios. 

Por su lado, el vicepresidente ejecutivo de la asociación, Víctor Rivera, indica que “el respeto al medio ambiente y a la calidad de vida de los ciudadanos puede y debe ser compatible con la actividad económica de empresas que no sólo prestan servicios a esos mismos ciudadanos, sino que también contribuyen a una mejora de la sociedad con la generación de puestos de trabajo y de aportaciones económicas e impuestos derivados de su propia actividad”.