El conflicto en las ITV asturianas sigue enquistado. El gobierno del Principado asegura que ve “viable” la implantación de la jornada de 35 horas semanales para los trabajadores -principal escollo en la negociación- si la medida va “asociada a una mejora de la productividad”, tal y como propusieron en la última reunión que terminó sin acuerdo.

La consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, Nieves Roqueñí, ha asegurado que el Principado tiene plena disponibilidad para dialogar y buscar un acuerdo que permita acabar con un conflicto que “tanto está perjudicando a la ciudadanía” por el aumento de las listas de espera en la decena de estaciones que tiene la empresa en la comunidad.

Roqueñí ha remarcado que la empresa pública puso encima de la mesa varias propuestas. Entre ellas, ha recordado, el abono con carácter inmediato de un complemento salarial de 73,13 euros al mes asociado a una reducción del absentismo, más elevado que la media del sector; la implementación de la jornada de 35 horas semanales a partir de septiembre “siempre que se mejore la productividad” y pase de 1,81 a 2,1 inspecciones a la hora, lo que aún estaría por debajo de la media nacional, o el reconocimiento de categorías profesionales según funciones y responsabilidades.

La consejera de Transición Ecológica ha defendido el compromiso de mejorar las condiciones de la plantilla, “tal como se puso de manifiesto el pasado diciembre, con la apertura de los procesos de selección que permitirán la contratación indefinida de 41 personas”.

El comité de empresa, dispuesto al acuerdo

Roqueñí ha hecho estas declaraciones el mismo día en que el presidente del comité de empresa, Marcos Llorente, ha asegurado que la plantilla de la empresa tienen la disposición de llegar a un acuerdo “lo antes posible”, puesto que el conflicto laboral que ha supuesto el seguimiento de paros parciales desde el pasado mes de noviembre no puede “alargarse mucho más en el tiempo”.

El presidente del comité de empresa, Marcos Llorente, ha admitido que no ha habido ningún contacto más con el Gobierno asturiano desde la última reunión, que finalizó sin acuerdo.

“Las reflexiones que ellos nos proponen es que abandonemos todas nuestras intenciones de conseguir algo. Las reflexiones que nosotros les proponemos a ellos es que sienten y acordemos algo realista”, ha comentado al respecto.

Medidas "muy sencillas"

En este sentido, ha asegurado que la reducción de la jornada semanal a 35 horas, el aumento de la plantilla y una revisión de las clasificaciones profesionales son medidas “muy sencillas” de aplicar y que redundarían en una bajada en las listas de espera.

Llorente ha pedido que se acabe con la “excusa” de que el servicio se presta en régimen de monopolio en Asturias, porque, según ha asegurado, existe en muchas comunidades, ya sea con modelo público o privado.