La actividad del sector automoción se irá reactivando progresivamente y serán los propios empresarios y trabajadores quienes tengan que poner en práctica las medidas de seguridad y protección oportunas. A este respecto, la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam) solicita al Ministerio de Sanidad que no derive la responsabilidad de contagio en el sector privado cuando se trata de una cuestión de salud pública.

La patronal de la distribución subraya que las empresas quedan en una situación de "desprotección e inseguridad jurídica" al ser las responsables del cumplimiento de la guía de buenas prácticas distribuida por el Ministerio de Sanidad, y de facilitar los equipos de protección individual a sus trabajadores.

"Si tenemos en cuenta la necesidad de recurrir a proveedores internacionales ante la falta de material en el mercado nacional, con plazos de entrega que están lejos de ser inmediatos y muchas veces con la necesidad de recurrir a terceros para verificar la homologación, estamos sin duda ante una obligación que no resulta fácil de cumplir en estos momentos, máxime cuando muchas empresas han donado su material al sector sanitario”, ha recalcado Raúl Palacios, presidente de la asociación.

Ante esta situación, la patronal también pone de manifiesto la dificultad de estas empresas del sector de poner en marcha las medidas que minimicen el contacto entre trabajadores y clientes ante "la falta de un protocolo homologado para higienizar" el vehículo. En este sentido, Ganvam apuesta por la necesidad de realizar recomendaciones específicas y exhaustivas dirigidas al sector de la distribución del automóvil.

Para este fin, Ganvam ha abierto una vía de trabajo con las asociaciones de prevención de riesgos laborales y con el resto de organizaciones del sector de la distribución para la elaboración de un protocolo marco que actúe como paraguas, especialmente en el ámbito de la posventa.