El pasado mes de mayo, los Mossos d'Esquadra detuvieron a Emelio D., un vendedor de coches de segunda mano de Autos Alain, en Mundiauto, en El Prat (Barcelona), tras la denuncia de 57 clientes que le acusaban, presuntamente, de estafa.

Sin embargo, en estos momentos, según publica El Mundo, el denunciado se encuentra en paradero desconocido tras quedar en libertad con cargos. Sobre él pesan 19 acusaciones por estafa y 38 por incumplimiento de contrato. La causa se encuentra abierta en el Juzgado de Instrucción número 2 de El Prat.

La investigación comenzó después de las denuncias presentadas en comisaría por los 57 clientes afectados que habían creado un grupo en WhatsApp.

Las querellas son de diferentes tipologías: vender un coche sin informar a su propietario, no cambiarlo de nombre, no abonar el dinero, vender el mismo coche a diferentes clientes, entregar turismos con averías o acumular deudas con talleres, gestores y clientes.

Según las autoridades, se trata de uno de los casos con mayor número de compradores de coches estafados y la cantidad estafada podría ascender a unos 200.000 euros.

Muchos dueños no saben que su coche se ha vendido, otros no tienen su documentación y algunos ni siquiera poseen la custodia judicial de su automóvil, explica el citado medio.