El Consejo de Ministros ha dado luz verde este martes al Real Decreto para fomentar una gestión más eficiente y segura de los residuos de los vehículos al final de su vida útil, que contempla que todos los vehículos susceptibles de ser matriculados por la Dirección General de Tráfico (DGT), no solo automóviles, tendrán que ser dados de baja en un Centro Autorizado de Tratamiento (CAT).
Según publica Europa Press, este documento permite modificar el Reglamento Generación de Vehículos de 1998 y está en línea con la Estrategia Española de Economía Circular 'España Circular 2030', aprobada en junio del año pasado.
Dicha estrategia busca impulsar un nuevo modelo de producción y consumo en el que el valor de productos, materiales y recursos se mantenga en la economía el mayor tiempo posible. La intención, con ello, es reducir un 30% el consumo nacional de materiales y un 15% la generación de residuos respecto a 2010 a lo largo de esta década.
Impulso de la economía circular
Por otro lado, el nuevo Real Decreto incorpora también al ordenamiento jurídico nacional la revisión de 2018 de la directiva europea aplicable en esta materia, "alineándose con los objetivos del Pacto Verde Europeo en lo que se refiere a las medidas de impulso a la economía circular".
Desde el Ministerio para la Transición Ecológica han indicado que este Real Decreto, junto con el Plan Moves III, aprobado el mismo día en Consejo de Ministros, son dos medidas que tienen en cuenta la retirada y el achatarramiento de los vehículos que se sustituyan por los adquiridos con apoyo de este plan, lo que facilita la correcta gestión de los residuos retirados a la vez que permite reforzar cadenas de valor en sectores como el aluminio o los plásticos, entre otros, contribuyendo a la economía circular.
Afecta a todo vehículo matriculado por la DGT
El nuevo texto normativo para impulsar una gestión más eficiente y segura de los residuos de los vehículos al final de su vida útil se aplicará a cualquier vehículo, no solo a automóviles, por lo que se garantiza que todo vehículo susceptible de ser matriculado ante la DGT sea dado de baja en un CAT al final de su vida útil.
El documento también especifica los criterios para diferenciar si un traslado de piezas de un vehículo que se desguaza se considera traslado de residuos o traslado de productos, con el objetivo de facilitar la preparación para la reutilización de esas piezas como repuesto para otro coche.
Igualmente, se regula la baja electrónica de los vehículos descontaminados al final de su vida útil y los requisitos mínimos que deben cumplir todas las instalaciones que traten estos vehículos, y no solo automóviles como sucedía hasta ahora.
Formación específica para la electrificación
Otro de los asuntos destacados en el texto legal son los trámites de entrega de los vehículos al final de su vida útil, así como las obligaciones de descontaminación por parte de los CAT. Se especifica al respecto que, en el caso de aquellos CAT que traten vehículos eléctricos e híbridos, en especial para la extracción de las baterías, deberán disponer de profesionales con una cualificación específica.
Aparte, el texto recoge modificaciones al Reglamento General de Vehículos orientadas a mejorar los procedimientos administrativos para velar por una correcta gestión de los residuos. Busca, igualmente, incorporar nuevos mecanismos de control que eviten la exportación ilícita o no contrastada de residuos, además de aportar mayor fiabilidad a los datos del Registro de Vehículos, mejorar la seguridad vial, evitando la puesta en circulación de vehículos que no reúnen las condiciones técnicas exigidas legalmente y de precisar los supuestos de baja temporal.
