La marca de frenos ATE apuesta por su expansión en España captando talleres que quieran adherirse a su red de centros reparadores. Desde su desembarco en nuestro país, en el año 2011, la enseña del grupo Continental ha conseguido sumar 40 centros a la cadena. La estrategia de la marca pasa por la diferenciación, especializándose en reparación de sistemas de frenos, a diferencia de una red clásica.

Para ello ATE selecciona talleres que quieran pasar a formar parte de su red de especialistas en freno, pero no necesariamente cambiando de enseña. Cualquier reparador que ya pertenezca a otra red (de cualquier especialidad mecánica) puede formar parte de la red Centros de Frenos ATE.

Los talleres de ATE han obtenido formación específica sobre reparación del sistema de frenado y tienen un contrato directamente con el fabricante que evalúa desde Alemania la idoneidad de cada reparador para formar parte de la red. Sin embargo, pese a pertenecer a ella, los talleres no tienen exclusividad con los productos de ATE, sólo precios y promociones especiales.

Con 40 centros en España, ATE quiere seguir creciendo, aunque a un ritmo pausado. De hecho, según su director comercial, Jesús Castillo, “no se esperan más de diez incorporaciones cada año”. La mayoría de sus asociados están localizados en la zona norte de España, especialmente en Galicia y País Vasco.

ATE ofrece a los reparadores “campañas, promociones y eventos específicos”, además de “apoyo constante para crear un vínculo con el cliente” según ha explicado su jefa de producto, Angélica Fernández. Los próximos pasos de la marca pasan por crear una nueva web corporativa y también una nueva web exclusiva para los centros de freno, para poder posicionarlos y “ayudar a resolver esa parte comercial que necesitan los talleres”.