El estado de alarma decretado en España ha dejado la imagen de calles sin tránsito de personas y vehículos aparcados y parados durante semanas. Una inmovilización que puede provocar daños y averías en algunos de los elementos del coche. Muchos conductores se preocupan por el estado de las baterías y no tienen en cuenta que otros componentes también sufrirán las consecuencias.

La Comisión de Fabricantes de Neumáticos ha advertido sobre la importancia de revisar las ruedas tras el confinamiento. Y es que estos elementos pueden haberse deformado o presentar baja presión tras un largo periodo en la misma posición, sufriendo además las inclemencias del tiempo en muchos casos. La paralización de los vehículos puede provocar algunos fallos en los neumáticos, tales como:

Deformación por plano en banda de rodadura

El neumático sufre esta deformación como resultado de la presión constante que se hace del peso del coche en un mismo punto. Es posible que se produzca un ligero temblor al volver a poner en marcha el coche, un fenómeno que se conoce como flatspotting.

Si un coche ha estado parado un largo período, al cargarse el peso sobre un mismo punto, el neumático ha podido aplanarse. Durante la conducción, hasta que el mismo se caliente y coja flexibilidad, puede presentar vibraciones. Un hecho que puede prolongarse en función del tiempo de estacionamiento, la calidad del neumático, el peso de la carga, los cambios de temperaturas, etc.

Agrietamiento en los neumáticos

Está muy relacionado con la edad de la goma, y la paralización del vehículo acelera el deterioro de la misma.

Baja presión de los neumáticos

Revisar la presión de los neumáticos es siempre muy importante, sin embargo, tras el confinamiento cobra relevancia, pues el vehículo ha estado un largo período inmovilizado y ha podido sufrir cambios, por lo que se recomienda medir esta presión antes de realizar largos y medios recorridos al volante.

Con la finalización del estado de alarma y la gradual vuelta a la normalidad, es vital mantener el vehículo a punto y para ello someter al coche a una revisión exhaustiva de los principales elementos de seguridad por parte de los profesionales del taller.