Cada vez se incorporan más tecnologías inteligentes a los vehículos de turismo. La inteligencia artificial puede reaccionar de modo más rápido que las personas, y estas tecnologías también están siendo incorporadas a los neumáticos. Unas tecnologías que interesan a los consumidores europeos, a los que les gustaría encontrar en un futuro neumáticos equipados con sensores capaces de medir, identificar y reaccionar a los cambios en el entorno, según un informe elaborado para Nokian Tyres.

Un neumático inteligente podría controlar y monitorizar tanto a sí mismo como a su entorno inmediato, a mayor velocidad y de una forma más polivalente de lo que podría hacerlo el propio conductor del vehículo. Por ejemplo, "los sensores del neumático podrían medir la profundidad de los surcos de la banda de rodadura y el desgaste de los mismos, y alertar al conductor de la necesidad de instalar unos neumáticos nuevos, o sugerirle que alterne los de atrás con los delante para equilibrar el desgaste de los mismos y optimizar de este modo su vida útil", afirma Teemu Soini, responsable de nuevas tecnologías de Nokian Tyres. 

Junto con los neumáticos inteligentes, los consumidores también desean neumáticos más seguros. De acuerdo con los resultados de la encuesta realizada por Nokian Tyres, casi uno de cada dos consumidores (el 44%) desean que los neumáticos sean más seguros de lo que ya son en la actualidad. Este porcentaje varía según los países analizados; así, la seguridad es crucial para el 34% de los conductores alemanes, el 51% de los italianos, el 30% de los franceses, el 50% de los checos y el 56% de los polacos. 

Entre las expectativas de los conductores europeos para el futuro próximo, también destaca la incorporación de tecnologías basadas en los sensores para adaptarse mejor a distintas condiciones y situaciones, citada por el 34% de los conductores encuestados.

Menos desgaste y más adaptación

Los conductores también se hallan particularmente interesados en neumáticos que se adapten a las distintas condiciones climatológicas mediante el uso de las tecnologías de sensores. De acuerdo con el estudio, un 33% de los conductores europeos espera que en un futuro sus neumáticos reaccionen automáticamente con relación a las condiciones climatológicas, suprimiendo la necesidad de realizar cambios estacionales de los mismos.

Asimismo, de cara al futuro, a un 25% de los usuarios europeos les gustaría que las ruedas se desgastasen a un ritmo inferior que en la actualidad.

El auge de los vehículos eléctricos también influye en las preferencias sobre los neumáticos del futuro. Que tengan una rodada suave, ahorren combustible y con ello amplíen la autonomía del vehículo es una característica citada por el 23% de los encuestados.

Por último, los conductores también desearían que los neumáticos fuesen más resistentes a los pinchazos y, a ser posible, que fueran autoreparables (el 22%).