Vege tiene ya un único dueño: LKQ, uno de sus accionistas de referencia desde hace tres años. Ahora se ha hecho con el control total de la compañía, al comprar las acciones de Continental Engines, empresa de nacionalidad india. Para ello, ha creado una nueva sociedad, Mirela Investments.

Producto de esta operación, su empresa en España, Vege Motoren Ibérica, deja de existir, ya que todos sus activos (stocks, cuentas, relaciones con clientes y proveedores) pasan a forman parte de Mirela Investments, al igual que su actual plantilla, con su director general, Juan Baixauli, incluido.

¿Qué supone que un gran grupo como LKQ compre Vege para sus clientes en España? “No cambia nada”, asegura Juan Baixauli. “La marca continúa y lo único que apreciarán a corto plazo nuestros clientes es que las facturas se emitirán a nombre de la nueva sociedad, que llevarán la imagen de Vege. Y la sede seguirá en nuestras actuales instalaciones de Ribarroja del Turia (Valencia)”.

Que LKQ sea el único propietario de Vege aumenta las expectativas de que se incrementen las inversiones en medios productivos, asegura Biaxauli. “Esto se traducirá en más capacidad de producción y en mejora de las calidades, por lo que nos afectará positivamente”. En el otro lado de la balanza, el temor a que “algún catastrofista deje de comprar Vege porque piense que LKQ es un enemigo para la distribución tradicional y ahora ya está en España”.

Quizá lo único que varía en relación a otras operaciones realizadas por LKQ en Europa es que si comenzó su introducción comprando empresas de distribución y desguaces (su origen en Estados Unidos), ahora lo hace con una fábrica, en este caso de motores y productos reconstruidos como Vege, y le será más accesible vender sus productos a grandes distribuidores como Rhiag en Italia o Euro Car Parts en Inglaterra, “obligados” a comprar Vege al ser empreas propiedad de LKQ.