La conducción autónoma sigue teniendo problemas y los accidentes siguen produciéndose, con la consiguiente inseguridad de los posibles compradores para decantarse por estos modelos. En esta ocasión, Tesla es de nuevo la protagonista.

En ocasión, expertos de la Universidad de Carolina del Sur y la Universidad de Zhejiang de China, en colaboración con la empresa de seguridad china Qihoo 360 han demostrado que se puede hackear el sistema de estos vehículos inteligentes.

Con ello, ponen de relieve lo sencillo que pueden ser poner en peligro la integridad de las personas que están dentro de un vehículo al manipular los sensores del piloto automático y hacerle creer que hay obstáculos en el camino cuando en realidad no es así y viceversa, tal y como explica la revista estadounidense Wired.

Dos generadores de señales de radio fabricados por Keysight Technologies y dispositivos de interferencia para confundir a los sensores ultrasónicos del Model S es lo único que necesitan los piratas informáticos para perturbar el sistema.

Asimismo, los investigadores demuestran que es posible hackear otros dos elementos que componen el Autopilot: la cámara y el radar.