FACUA-Consumidores en Acción vuelve a alertar de la llamada a revisión de un nuevo vehículo de Volkswagen. En esta ocasión, se trata de los Passat fabricados entre 2015 y 2016. Estos pueden estar afectados por un problema en el sistema electrónico de estabilización.

Según la compañía, los émbolos de la bomba de algunas unidades se pueden atascar por el aumento del desgaste de la herramienta en el proceso de fabricación de la unidad hidráulica del programa electrónico de estabilización.

Por este motivo, en situaciones de marcha límite, si hay un émbolo de la bomba atascado, el control del programa electrónico de estabilización queda limitado. Si fallaran varios a la vez, el programa quedaría inoperativo, elevando el riesgo de accidente de tráfico, tal y como explica Volkswagen.

Asimismo, el fabricante alemán ha asegurado que también analizará unidades de los modelos Beetle, Golf, Jetta y de los propios Passat por una anomalía en las culatas. La enseña indica que el problema afecta a los vehículos con motores 1.8 y 2.01 de 2016.

Este problema, explica la firma, provoca una falta de estanqueidad en el distribuidor de combustible y, por tanto, una restricción en la alimentación, lo que puede dar lugar a un posible incendio.

La empresa ha indicado que está contactando con los propietarios de los vehículos afectados para revisar y sustituir las piezas defectuosas.