“Si no conocemos cómo está el mercado, si no usamos bien las herramientas de valoración de siniestros y no aplicamos los medios para ser más competitivos y productivos, los talleres de carrocería y los actores que intervienen en el negocio de reparación de chapa y pintura tendremos un problema”.  Con estas palabras cerraba Miguel Juesas, gerente de Recambios Segorbe, las intervenciones que dieron forma a la IV Convención de Carrocería organizada por la empresa distribuidora, que hizo coincidir este año con la celebración de una Expo con motivo de su 40 aniversario, en Vila-Real (Castellón), el 26 de octubre.

Las pronunció a modo de reflexión y conclusiones de las diferentes ponencias que dieron forma al evento, dirigido a talleres de carrocería de las provincias de Castellón, Valencia y Teruel, clientes de Recambios Segorbe, asociado de Grupo Serca. Miguel Juesas envió, no obstante, un mensaje de optimismo, “hay futuro”, no sin advertir antes de que los talleres “siguen sin conocer el coste real” de su trabajo.

La IV Convención de Carrocería de Recambios Segorbe comenzó con la intervención de José Luis Gata, director de Posventa de Grupo Solera en España, que anunció que hasta 2025 no se alcanzará el nivel de volumen de negocio generado en el año 2007 y que las ventas en 2018 del conjunto del sector (venta y posventa) crecerán casi el 4%.

José Luis Gata animó a los talleres de carrocería presentes en la sesión a que sean eficientes, “que os paguen diez horas por un trabajo que conseguís hacer en ocho”, y les recordó que su facturación se distribuye de la siguiente forma: 38% mano de obra, 12% pintura y 50% recambios. El experto del Grupo Solera también les avisó de que una incorrecta elección en el tipo de pintura puede hacer perder al taller hasta el 15% y les recomendó que presten mucha atención a la gestión: “Se puede llegar a perder entre el 12% y el 15% en cada reparación si no se gestiona bien”.

A corto plazo, José Luis Gata espera que las reparaciones seguirán creciendo en torno al 2% hasta el 2022. En la actualidad, la tercera parte de los ingresos provienen de reparaciones entre 1.200 y 3.000 euros, aunque sólo representan el 16% de las mismas. La mitad de ellas son de menos de 600 euros, pequeñas intervenciones que suponen el 20% de la facturación total.

La composición del parque también es un dato esencial para explicar la evolución del negocio de la posventa. En este sentido, indicó que el 21% de los vehículos actuales (turismos y todoterreno) que circulan por nuestras carreteras tiene una antigüedad de menos de cinco años, pero es el que aporta más número de reparaciones (el 43%), con el inconveniente para el sector multimarca que casi el 50% de los propietarios de estos vehículos se mantiene fiel al concesionario.

Con el auge de las matriculaciones los tres últimos años, en 2022 aumentará el número de coches “jóvenes”, el 23%, que concentrarán el 48% de las reparaciones, señaló José Luis Gasta, quien destacó asimismo el repunte del número de kilómetros recorridos por vehículo. En cambio, como dato negativo, auguró el descenso de coches en la franja entre cinco y diez años, “los que más kilómetros hacen”.

Por su parte, Jon Ureta, socio fundador de VASIC, mostró casos prácticos de valoraciones realizadas en el taller con los baremos de Cesvimap y Centro Zaragoza en el área de pintura cuyo resultado resulta adverso para los reparadores. “La rentabilidad del taller de carrocería también depende de la rentabilidad del personal encargado de la valoración de los daños. No importa sólo conocer bien los baremos, sino todo lo que está detrás, sin aflorar, que es lo que puede decantar la rentabilidad de una valoración”.

La tercera ponente de la jornada fue Bea Santamaría, manager de Business Solutions de PPG (de cuya una de sus marcas, Nexa Autocolor, es distribuidor Recambios Segorbe). Se encargó de transmitir a los talleres la importancia de la gestión operativa en las empresas de reparación de carrocería para reducir costes y ser más atractivos y competitivos. La experta del fabricante de pintura enumeró los diferentes centros de coste en un taller: venta, reparación, recambios, personal, instalación y repetición (“el peor coste de todos”).

Con esta introducción, Bea Santamaría puso después el foco en la ayuda que el programa MVP de PPG, utilizado por Recambios Segorbe desde hace más de 25 años, aporta a las empresas de reparación de carrocería. Analizar la capacidad del taller, tanto en volumen de reparaciones como de cada de sus departamentos, organizarlo, desarrollar al personal, formación técnica y control de costes son funciones que PPG pone a disposición de los talleres de chapa y pintura con su programa MVP.