Entre las 15 medidas propuestas por Ganvam al futuro Gobierno entrante para revitalizar el sector de la automoción, el segundo en importancia del país, la mayoría afectan en gran medida o al menos en parte al ámbito de la reparación. Y, aunque en algunos casos ni siquiera permitiría a los talleres obtener beneficio económico con ello (como el caso de la implantación del sello de calidad Ganvam para el VO), el 80% de los talleres asociados de Ganvam apoya las medidas de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios porque sí ayuda a mejorar en conjunto el sector, según explicó en un desayuno informativo Ana Sánchez Anés, directora general de la asociación.

En primer lugar, Ganvam reclama un libre acceso al big data que permita a los vendedores, pero también a los talleres, acceder a los datos generados por el coche conectado con el objetivo de garantizar el libre mercado y asegurar que la distribución pueda rentabilizar su cartera de clientes. Se aboga por una “plataforma abierta, segura y libre” para canalizar dicha información, aunque esta iniciativa tiene un enemigo más poderoso aún que el Ejecutivo central, como es Bruselas, que tiene paralizado el proyecto.

Por supuesto, la lucha contra los talleres ilegales es una de las reclamaciones históricas de Ganvam a los Ejecutivos, independientemente de su color político. Cree necesario en este caso, modificar el Reglamento General de Circulación para incluir la prohibición expresa de la venta y reparación ilegal, y pide a su vez la aplicación rigurosa de la ley que establece apercibimientos y cierres para los centros que no cumplan con la normativa.

Una de las medidas estrella es la creación de una Secretaría de Estado de Automoción que vele por la venta y posventa del sector, pero otra de las novedades es el sello de calidad Ganvam para la venta del VO. En este caso, no se trata de una propuesta, sino de una realidad que verá la luz el próximo año. Y aunque el objetivo es “asegurar una mayor protección al comprador de vehículos de ocasión”, también afectará a los talleres asociados a la patronal, en el sentido de que será en estos donde se certificará que los mantenimientos son los adecuados y se creará un historial de cada coche, ampliando la información que ofrece el Informe del Vehículo.

El Real Decreto de Talleres no responde a la realidad

De forma mucho más clara afecta la propuesta de Ganvam para reformar el Real Decreto de Talleres, del que denuncia que “ya no responde a la realidad de la posventa para regular prácticas que viven en un limbo legal en cuanto a obligaciones de consumo, prevención de riesgos o medio ambiente”. Y también aboga por equilibrar las relaciones del taller con las compañías de seguros, pidiendo la puesta en marcha de un reglamento que regule el proceso de peritación de siniestros para evitar desequilibrios y situaciones desfavorables para el taller.

En el apartado impositivo se engloban hasta cinco cambios, pero la que afecta a la reparación propone un IVA reducido a las operaciones de mantenimiento y reparación que beneficien a la seguridad vial, tales como sustitución de neumáticos, frenos, suspensión, dirección o sistemas ADAS. Ganvam considera que se evitaría así que los conductores busquen alternativas a bajo precio sin garantías en centros clandestinos y aumentará el volumen de reparaciones, para lo que también propone que la DGT haga campañas de concienciación para sensibilizar al conductor de la importancia del mantenimiento preventivo.

Por último, en el marco de una propuesta mucho más ambiciosa de apoyo a la digitalización de la pyme, considera necesario hacer una réplica del programa HADA (Herramienta de Autodiagnóstico Digital Avanzado) adaptado al sector de la venta y la reparación.