¿Por qué tragan los talleres con las aseguradoras? Es la pregunta que se realiza Gaspar Pedreño, el conocido como 'Tallerista Rebelde' en un nuevo vídeo en redes sociales.

La respuesta, la resume de forma sencilla: "por ignorancia y por miedo". "Nosotros éramos un taller que se callaba. Hasta 2018 yo no abrí los ojos", reconoce.

Pedreño cuenta en esta reflexión su historia, cómo su taller y él personalmente, se revelaron contra la situación del sector, en torno a los problemas con la rentabilidad derivados de las condiciones que imponen las aseguradoras.

El punto de inflexión

Todo empezó tras perder el compromiso de pago de Línea Directa tras una reclamación de un cliente. "Perdemos el compromiso con la primera aseguradora, el pago directo al taller. Me vi acojonado", destaca.

Sin embargo, ese miedo era fruto de la ignorancia. "Al taller le da miedo otra cosa que ese pago directo, cuando es una mentira. Un invento en España y que no se da en otros países donde el cliente paga su factura y que esta le reembolse", señala.

Así, de esta forma comenzó la revuelta de Pedreño y de otros muchos talleres. "Fuimos a A Coruña y montamos una cooperativa, Siauto, y en ese momento, perdimos el miedo. Empezamos a saber que hay otra posibilidad", ha destacado.

La rentabilidad como objetivo

El factor fundamental no es otro que la rentabilidad, no el trabajo. "No merece la pena estar trabajando 12 horas al día y que al final del mes te queden cuatro duros. Es muy difícil conseguir que tu negocio sea rentable si te supeditas a las condiciones que imponen las compañías porque, al final, acabas trabajando para su rentabilidad, no para la tuya", asegura.

Pedreño asegura que desde entonces han cambiado su forma de trabajar con las aseguradoras, para que sean estas las que abonan al cliente. "El trabajo no falta. Se está asesorando a los clientes. Me gusta tener esa conciencia para que el cliente tenga la última palabra", expone.