NRF ha desarrollado una gama de núcleos con control electrónico, control neumático, y viscosos, con la que provee de un programa completo para sistemas de refrigeración al vehículo industrial.

Mantiene un exhaustivo control de calidad, y para ello cada producto adjunta un informe de inspección. Para conseguir estos resultados, NRF controla cada núcleo en cuatro fases funcionales y una inspección de funcionalidad general.

El fabricante desarrolla este completo control de calidad en cinco pasos: fase de arranque, fase de regulación, fase de desacoplamiento, fase de acoplamiento y, por último, inspección de funcionalidad.

NRF hace hincapié en las múltiples ventajas de los núcleos con control electromagnético incluidos en su catálogo. Entre ellos, el sistema controlado por la gestión de motor (ECU), un tiempo de reacción menor en el acoplamiento y desacoplamiento, rendimiento según la necesidad, ahorro de combustible y menor ruido de motor.